Sobre la detención del líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, la ministra del Interior, Izkia Siches, dijo que «nadie está por sobre la ley» y anunció que un equipo jurídico del Gobierno se presentará mañana en la audiencia de control de detención. También llamó a “no sacar réditos políticos”. Parlamentarios oficialistas y de la oposición, además de autoridades del anterior gobierno, calificaron lo ocurrido como «una buena noticia» y que «no es un logro del gobierno, sino que del Estado».

En tanto, los gobernadores de La Araucanía y el Biobío pidieron que por motivos de seguridad Llaitul sea trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Santiago.

En Cañete, donde fue detenido el líder de la CAM, por precaución finalizaron en forma anticipada sus actividades los colegios y parte del comercio estaba cerrando más temprano de lo habitual.

En un comunicado, la CAM apuntó que la detención de su líder Héctor Llaitul «busca amedrentar» su proyecto político-estratégico. Además, llamaron a continuar la lucha contra “el gran capital” «con la resistencia y sabotajes en contra, principalmente, de la industria forestal, hidroeléctrica, minera y salmonera».

En un comunicado emitido por la Coordinadora Arauco Malleco tras la detención de su líder se señala que “la detención de nuestro vocero y dirigente histórico Héctor Llaitul, busca amedrentar el proyecto político-estratégico que llevan adelante familias, comunidades y weichafe dignamente”.

«Este proyecto político-estratégico ha sido la matriz del movimiento mapuche autonomista y de liberación nacional de nuestro pueblo hace ya 25 años. Es por esto que, declaramos esta detención como la materialización de la persecución política en contra de nuestro proyecto político, el cual ha permeado en comunidades que hoy mantienen en jaque la presencia de la industria forestal principalmente», añadieron.

En esa línea, señalaron que la detención de Llaitul es «un punto de inflexión para el movimiento mapuche autonomista revolucionario que

contrapone tajantemente la confrontación a este Estado colonial y su política de integración forzada. O luchamos de verdad por la reconstrucción nacional mapuche o sólo es discurso y presión para recibir migajas que ofrece el Estado».

El  comunicado calificó al Gobierno de Gabriel Boric de «pseudo izquierda» que da continuidad a lo que fue la Concertación y que se ponen al servicio «de las oligarquías y conglomerados económicos que tienen sus intereses puestos en nuestro territorio ancestral mapuche».