Algunas reacciones “un poco más cuerdas” en cuanto al movimiento de las tropas rusas en Ucrania se han apreciado en las últimas horas, después de la cumbre de la OTAN en Madrid, al informarse que Rusia ya se ha retirado de la isla de las Serpientes o en el mar Negro, que fuera ocupada por los rusos en el primer día de la invasión, el 24 de febrero, por su situación estratégica.
Mas tarde se anunció igualmente, “en un gesto de buena voluntad” según los rusos, la salida de un buque con grano del puerto de Berdiansk en Zaporiyia, ciudad prorrusa situada sobre el río Dniéper.
Mientras tanto, en tierra firme, Rusia continúa su ofensiva por el este, centrada en la ciudad de Lisichansk, último bastión de resistencia en la provincia de Lugansk, (es ucraniana pero desde abril de 2014, administrada de facto por «la denominada República Popular de Lugansk»).
«El 30 de junio, como medida de buena voluntad, las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa completaron sus tareas asignadas en la isla Zmiiyiy y retiraron la guarnición estacionada allí», anunció el portavoz castrense, Ígor Konashénkov, en la cuenta oficial del Ministerio de Defensa en Telegram.
Zmiinyi ganó fama mundial cuando un guardia fronterizo ucraniano, Román Gríbov, que fue capturado con 12 compañeros por los rusos en la pequeña isla, respondió con el dedo medio alzado a la exigencia de rendición de los comandantes del otrora buque insignia de la Flota rusa del mar Negro, el «Moskvá», hundido en abril por Ucrania.
La isla tiene un gran valor estratégico, pues quien la domine tiene el control del mar, la tierra y el aire en la parte noroeste del mar Negro y el sur de Ucrania, con la importante ciudad portuaria de Odesa al alcance de la artillería. Servía para dar cobertura a la aviación rusa y la Flota del mar Negro, entre otras ventajas estratégicas.
Las tropas rusas llevan a cabo este jueves una ofensiva cerca de Verkhniokamyanka y operaciones de asalto en el área de la refinería de petróleo Lisichansk (derecha) , donde la batalla continúa».
El Gobierno de Moscú asegura, sin embargo, que su Ejército controla la refinería, la mayor de Ucrania, algo que no puede ser verificado por una fuente independiente. «Las instalaciones de la mayor refinería de Ucrania, la de Lisichansk, están bajo total control de las fuerzas aliadas», informó el representante en Rusia de la autoproclamada república popular de Lugansk, Rodión Miroshnik. «Los combatientes huyeron y dejaron sus refugios y su equipamiento bélico», añadió.
Además, aseguró que todas las carreteras importantes de acceso a Lisichansk están bajo control de las fuerzas de Rusia y la república popular de Lugansk. Según afirmó Miroshnik a la televisión rusa, las tropas rusas ya controlan alrededor del 50% de la ciudad, y expresó la esperanza de que, durante la jornada de hoy, los prorrusos den «el último empujón» para tomar la urbe.
Según estos datos, las regiones de Lugansk y Donetsk, que forman el Donbás, fronterizo con Rusa, siguen centrando los ataques de las tropas rusas en su intento de unir este territorio con el sur ucraniano que ya controlan.
Otra de los puntos afectadas por los bombardeos es Jarkóv (la segunda mayor ciudad de Ucrania, con una población estimada de 1.433.86 habitantes (2021), en el noreste).
Allí, «el enemigo continúa defendiendo las posiciones previamente ocupadas. Los invasores abrieron fuego con tanques, morteros, artillería y cohetes en los distritos de la ciudad de Járkov, y las localidades de Pytomnyk, Ukrainka, Peremoha, Dementiyivka, Prudianka, Korobochkyne y Rubizhne».
Nuevo telón de acero
El ministro ruso del exterior, , sin embargo, afirmó que un nuevo “telón de acero” está descendiendo sobre Europa a lo que ésta debe observar con mucho cuidado para no encontrarse con sorpresas, repitiendo palabras atribuidas en 1946 al entonces primer ministro británico, Winston Churchill, quien anunció así una larga era de enfrentamiento con Moscú.
“Que Occidente tenga cuidado para no pillarse las manos”, declaró Lavrov, refiriéndose indirectamente a las decisiones de la cumbre de la OTAN en Madrid. A este respecto el presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró que Rusia “responderá de la misma manera” si la OTAN despliega sus bases en Finlandia y Suecia, que están ya prácticamente dentro de la Alianza occidental después que Turquía retirara su veto tras una larga y complicada negociación que involucró y se centró también en el conflicto curdo.
El papel clave de Erdogan
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, advirtió este jueves que vigilará que Suecia y Finlandia cumplan los compromisos que adquirieron para que Ankara levantara el veto al ingreso de ambos en la OTAN y que, de lo contrario, el Parlamento turco no aprobará el proceso de adhesión de los dos países nórdicos. «Esto es el comienzo.
Seguiremos de cerca la aplicación de las promesas hechas en el memorándum (firmado con la OTAN) y tomaremos medidas en consecuencia», dijo el líder turco en una rueda de prensa al final de la cumbre., refiriéndose al documento firmando el martes por los tres países y que desbloquea la apertura del proceso de adhesión. De hecho, Erdogan ha afirmado que entre los compromisos de Suecia se cuenta la extradición de 73 personas a Turquía, una afirmación sobre la que fue insistentemente preguntado por medios del país escandinavo.
Otan , Biden y España
La cumbre de la OTAN en Madrid cerró este jueves sacando adelante una estrategia para los próximos diez años, en la que garantiza que defenderá «cada centímetro» del territorio de cada uno de sus socios y que ha pasado a considerar a Rusia de un (ex) socio estratégico a su mayor amenaza. Los líderes de la OTAN concluyeron su cumbre con un debate sobre las amenazas que afectan a la Alianza y sus socios desde el sur, en concreto la terrorista, y aprobaron por primera vez un paquete de apoyo a las capacidades de Defensa de Mauritania, además de reforzar su ayuda a Túnez. Los 30 aliados pusieron fin a dos días de reuniones en la capital de España con una sesión de trabajo sobre los retos en Oriente Medio, el Norte de África y el Sahel, abordando igualmente el caso de China.
Británicos atrapados por Rusia
Por otra parte, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) se dirigió este jueves al Gobierno ruso para pedirle que no aplique la pena de muerte a los dos ciudadanos británicos que fueron capturados por las tropas rusas mientras servían para el ejército ucraniano y que fueron condenados a muerte por un tribunal de la zona controlada por Rusia.
El corresponsal en Moscú del diario El País de España, Javier G. Cuesta, escribió que “el reloj ha vuelto al comienzo de la Guerra Fría entre occidente y los —entonces— países del Este.
Según Lavrov, las relaciones con la Unión Europea «no existen desde 2014». Pese a los esfuerzos negociadores mantenidos estos años por países como Alemania y Francia en ámbitos como los acuerdos de Minsk de 2015 (referentes a Ucrania), el ministro ruso ha asegurado que el bloque «no ha tenido coraje para razonar con los golpistas que tomaron el poder ilegalmente, y comenzó a apoyarlos en su ofensiva contra los habitantes de Crimea y el este de Ucrania».
El denominado Protocolo de Minsk es un acuerdo para poner fin a la guerra en el este de Ucrania, firmado por representantes de Ucrania, la Federación Rusa, la antigua República Popular de Donetsk (DNR) y la República Popular de Lugansk (LNR) el 5 de septiembre de 2014 bajo los auspicios de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). El acuerdo se rompió ecuando este año Putin reconoció como rusa la región ucraniana de Donbass en el este de Ucrania.
Lavrov en Bielorrusia se refirió también a las protestas de Maidan (en Ucrania, 2014) que culminaron con la huida del expresidente Víktor Yanukóvich (prorruso). Sin embargo, el propio Vladímir Putin reconoció la legitimidad de los presidentes electos Petró Poroshenko y Volodímir Zelenski tras los comicios de 2014 y 2019, respectivamente.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció este jueves que «a partir de hoy, Ucrania puede exportar electricidad al mercado europeo».
Ucrania ya fue aceptada esrta semana, en principio, como un estado miembro más de la Unión Europea (UE)
Von der Leyden agregó Ucrania «proporcionará una fuente adicional de electricidad a la UE, así como ingresos económicos que Ucrania necesita urgentemente. De esta forma, ambos nos beneficiamos».
A su vez el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, comunicó que Washington donará 800 millones de dólares más (768 millones de euros) en ayuda adicional para armas a Ucrania en los próximos días, que incluirán sistemas de defensa aérea y armas ofensivas. «Vamos a apoyar a Ucrania todo el tiempo que sea necesario», ha reiterado el mandatario, en su rueda de prensa de clausura de la cumbre de la OTAN en Madrid. «Todos los aliados vamos a estar con Ucrania. La guerra no terminará con una victoria de Rusia sobre Ucrania», ha asegurado Biden.
“Hay que ver el impacto de la guerra para Rusia”, dice Biden, que resalta algunos malos datos en su economía. “No pueden mantener la producción de petróleo porque no pueden acceder a la tecnología que necesitan. Están pagando un precio muy alto, muy alto”, dice Biden sobre las sanciones occidentales contra Moscú.
Por otra parte el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, confía en que Ucrania tiene la capacidad de ganar la guerra a Rusia, según ha afirmado durante su comparecencia en la clausura de la cumbre de la OTAN en Madrid. «Creemos que ellos [los ucranios], de hecho, tienen en su poder repeler a los rusos y devolverlos a la posición anterior al 24 de febrero», ha declarado Johnson.
Las palabras del mandatario llegan después de que las tropas rusas se retiraron de la Isla de las Serpientes.