El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió este miércoles, en el día 63 de la guerra contra Ucrania, que responderá de manera brutal a cualquier tipo de injerencia estratégica externa, dejando abierta la puerta de ataques a otros países europeos fuera del territorio ucraniamo.
El anuncio «putinista» ha tensando aún más la situación en la zona de guerra. Tanto es así que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenzki, respondió diciendo que lo que Putin quiere es desmembrar y rediseñar las fronteras de Europa central y oriental.
«El objetivo final del liderazgo ruso no es solo apoderarse del territorio de Ucrania, sino el de desmembrar toda Europa central y oriental y asestar un golpe global a la democracia», dijo.
Lo mismo declaró el alacalde de Kiev, Vitali Klitschko: «El objetivo de Rusia es ocupar la capital de Ucrania e invadir todo el país, pese a que actualmente ha redistribuido sus tropas para lanzar una ofensiva en el este».
«Los rusos tratan de ocupar todo el país. Hace unos años, pensábamos que el objetivo era Crimea y no lo es. (Pensábamos que eran las regiones de) Donetsk y Lugansk, y no lo es. El objetivo sigue siendo Kiev, la capital de Ucrania, porque la capital tiene un estatus simbólico, es el corazón del país», dijo Klitschko en una rueda de prensa.
El encuentro del martes en la base norteamericana de Ramstein, Alemania, de los ministros de Defensa de 43 países convocados por el Jefe del Pentágono, Lloyd Austin, y el jefe de la diplomacia norteamericana, Antony Blinken, abre una nueva fase en la guerra en Ucrania, agravada ahora con la decisión de Moscú de cortar el suministro de gas a Polonia y Bulgaria.
El objetivo de la reunión en Ramstein era abrir una colecta de dimensiones tan importantes y riesgosas por la reacción del presidente Putin (los rusos amenazan continuamente con llegar a una Tercera Guerra Mundial si es necesario), que según el secretario de Defensa Lloyd Austin no solo refuerza la resistencia de los ucranianos, sino que consolida la esperanza de que venzan la guerra a Rusia.
Evacuación de civiles refugiados en Azovstal
La ONU anunció este miércoles que está preparando ya una operación junto al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para evacuar cuanto antes a los civiles refugiados en la acería ucraniana de Azovstal, en la ciudad portuaria de Mariúpol.
El movimiento llega después de que el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, logró el martes un principio de acuerdo con el presidente ruso, Vladímir Putin, para que la ONU y el CICR coordinen la salida del millar de civiles que se cree que hay en esa instalación, donde también se encuentra un número indeterminado de combatientes ucranianos asediados por fuerzas rusas.
El portavoz Farhan Haq de la ONU, recalcó la urgencia de esta operación, pero se adelantó a decir que para ésta se requiere tiempo (varios días) para poder prepararla y de que no se pueda llevar a cabo hasta que no haya garantías de que las partes respeten un alto el fuego que permita la evacuación. Hoy, en la zona, siguieron los intensos bombardeos rusos.
En la planta metalúrgica de Azovstal, en la ciudad ucraniana bombardeada de Mariúpol, asediada por el ejército ruso, habría en estos momentos más de 400 heridos, entre soldados y civiles, según fuentes del batallón Azov, parte del Ejército ucraniano.
La UE no cederá al chantaje ruso
La Comisión Europea no cederá al chantaje ruso, después de que Gazprom cortara el suministro de gas a Bulgaria y Polonia, como declaró su presidenta Ursula von der Leyen
Si los polacos resisten gracias a sus reservas y a la nueva conexión con Noruega y Bulgaria tendrá que ser abastecida por sus socios europeos porque sólo tiene reservas para un mes, dijo la alta funcionaria.
Los dos países se negaron a pagar el gas ruso en rublos, como exige Moscú, para no violar las sanciones europeas contra Rusia por su ataque a Ucrania.
La guerra en Ucrania podría durar hasta comienzos del año próximo, dijo entretanto el consejero del presidente ucraniano, Oleskiy Arestovych, a la agencia de prensa Ukrinform Arestovych subrayó que el eventual fin de la fase activa en el Donbás no representará el fin de la guerra.
»Habrá más acciones tácticas, bombardeos aéreos, guerra. Es una larga historia que podría ser muy larga, podría durar hasta el próximo año. Todo depende de una serie de circunstancias», advirtió el consejero.