Los constituyentes por primera vez este jueves plantearon sus preferencias en la Comisión de Sistema Político sobre el nuevo régimen de gobierno que necesitaría Chile para las próximas décadas y que podría quedar registrado en la nueva Carta Magna que se está redactando. Así en este importante debate estuvo en carpeta un presidencialismo, no como el de ahora, sino más “atenuado o adecuado”, como lo definió en sus entregas noticiosas Radio Pauta, pero igualmente se abordó el régimen parlamentario (como ocurre en Europa).
La comisión integrada por 25 convencionales,una mayoría de 15 se pronunció por un presidencialesmo modificado, no como el actual, en el que el presidente concentra demasiado poder en la toma de decisiones. Sin embargo, los constituyentes del Frente Amplio e independientes se expresaron más bien a favor de un gobierno parlamentario..
Durante la deliberación, los convencionales destacaron como una buena señal que exista consenso en el diagnóstico común sobre los elementos que han generado inestabilidad y dificultad para gobernar, a pesar que hubo fuerte discrepancia en las causas que han producido este problema en la larga historia chilena.
Marcos Barraza (PC) argumentó que él es partidario de un sistema presidencial atenuado que consista en que las urgencias son compartidas entre el Legislativo y el Ejecutivo. Su par comunista Bárbara Sepúlveda compartió la línea de Barraza, y mencionó la conveniencia de que se cree una nueva figura de vicepresidente.
En el sector de la derecha hay concordancia en que el sistema presidencial con adecuaciones es la mejor alternativa.
Hernán Larraín (Evópoli) se refirió al «reformismo gradual». Mencionó la importancia de fortalecer el Congreso y empoderar a los partidos políticos. Asimismo, indicó que «el parlamentarismo se enfrenta a la cultura chilena», como informó Radio Pauta.
Para Marcela Cubillos (Ind. UDI), las adecuaciones al sistema presidencial deben ir en la línea de disminuir la concentración de poder en el Ejecutivo y «la importancia de generar un mecanismo de peso y contrapeso», refiriéndose al empoderamiento del Congreso. También cree que tiene que existir un jefe de gabinete y se debe eliminar la incompatibilidad para que los parlamentarios puedan asumir como ministros. Esa opción es común en regímenes parlamentarios; también en algunos semipresidenciales con alto componente parlamentario (como Singapur), llamados gobiernos presidencial-parlamentario.
El Colectivo Socialista también se definió a favor de un presidencialismo «atenuado». El coordinador de la Comisión, Ricardo Montero (PS), también habló de la necesidad de un vicepresidente o jefe de gabinete, dupla que «debe ser paritaria». Además, señala que la elección parlamentaria se debe realizar en la segunda vuelta presidencial.
«No creo que en Chile la ciudadanía acepte no elegir a su Presidente», dijo el convencional Maximiliano Hurtado (PS). Cree que, para favorecer la gobernabilidad, se debe permitir que los parlamentarios sean a la vez ministros. «Desconcentrar el poder del Ejecutivo, manteniendo un régimen presidencial, favoreciendo a los gobiernos regionales», resumió Hurtado.
En el caso de Rosa Catrileo (Mapuche), quien también preside la Comisión junto a Montero, «la plurinacionalidad no exige un régimen específico», pero dijo que se inclinaría por un presidencialismo atenuado antes que el parlamentarismo. Respecto del Estado Plurinacional, planteó que «la libre determinación no supone separación del Estado y no contraviene la república».
Fuad Chahin (Col.del Apruebo) fue el único que durante la instancia se mostró proclive al semipresidencialismo atenuado. Argumentó que para lograr gobernabilidad y evitar lo que existe hoy, las elecciones parlamentarias no deben efectuarse antes del balotaje presidencial, para evitar que las coaliciones se forman antes. «Esto genera una lógica de caudillismo y entrampamiento en la negociacion del Legislativo y Ejecutivo», dice Chahin.
Los convencionales del Frente Amplio e Independientes No Neutrales apoyaron o evalúan la implementación de un régimen parlamentario.
Fernando Atria (FA) señaló que el parlamentarismo es «la forma natural de organización de un régimen democrático». Enfatizó que «la deslegitimación actual está vinculada al hiperpresidencialismo, característica del régimen político chileno». Asi mismo, cree que las herramientas que se podrían incluir en un eventual presidencialismo atenuado «no son las soluciones».
Para Constanza Schonhout (FA), la implementación del sistema parlamentario es una buena opción, pero cree que es necesario fortalecer y reestructurar los partidos políticos.
«Me entusiasma lo que he escuhado sobre el sistema parlamentario para lograr una mayor gobernabilidad. Creo que puede manejar mejor nuestro sistema multipartidista», dijo la periodista Patricia Politzer (INN). Reconoció que la profunda crisis de credibilidad que atraviesan las colectividades y la cultura del país son dos grandes obstáculos. «Nuestro país es presidencialista», subrayó.
Guillermo Namor (INN) fue menos categórico: «No me cierro al parlamentarismo».
El constituyente Renato Garín (Lista del Apruebo) fue el único en señalar que la solución sería la «salida federal», explicando que se deberían conformar tres cámaras macroregionales (sur, centro y norte), además de una general. Ello, sin embargo, no apuntaba a la propuesta de régimen de gobierno.