Este viernes se produjo un preocupante «quiebre» en la extrema izquierda chilena, después de conocerse que un grupo de movimientos de izquierda, liderado por el Partido Comunista, que apoyan la candidatura de Gabriel Boric, entregó una declaración en la que respaldan la “reelección” del dictador Daniel Ortega en Nicaragua, aunque el candidato de Apruebo Dignidad se desmarcó de dicha postura y el líder del partido indicó que “el PC acatará (la política exterior de Boric), aunque se expresen diferencias». Además, la diputada Camila Vallejo aseguró «en cierta forma criticando al líder Guillermo Teillier, que la declaración no fue «discutida ni resuelta por la dirección colectiva del partido”.
La declaración fue liderada por el Partido Comunista, y apoyada por el Partido Igualdad, el Movimiento del Socialismo Allendista, Izquierda Libertaria, Ukamau Chile y el Movimiento de Pobladores en Lucha.
Ortega (derecha) fue reelegido presidente de Nicaragua el domingo, en una elección muy controvertida debido a que él corrió prácticamente solo y todos los postulantes de oposición no pudieron llegar a las urnas porque el mandatario los encarceló (siete) tras acusarlos de promover sanciones internacionales, traición a la patria, lavado de dinero y atentar contra la soberanía.
Pero para los comunistas chilenos todas estas versiones no existen y en la declaración señalan textualmente que ”el pueblo nicaragüense concurrió masivamente a las urnas para elegir democráticamente a sus autoridades y lo ha hecho en paz, de acuerdo con su institucionalidad y leyes vigentes. Las elecciones se realizaron con la presencia de observadores y acompañantes internacionales y contaron con una masiva participación y concurrencia a las urnas de más del 68% del electorado nicaragüense en un sistema de voto voluntario a partir de los 16 años de edad, en medio de un conflicto de intereses donde el gobierno norteamericano es contraparte”.
El Gobierno chileno, en otra declaración, expresó esta semana que Chile no reconoce la legitimidad de las elecciones asegurando que estas “consolidan un régimen dictatorial”.
En ese sentido, el candidato presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, salió esta mañana a desmarcarse de la posición del PC e, incluso, calificó los comicios nicaragüenses de “fraudulentos”.
“En nuestro gobierno el compromiso con la democracia y los derechos humanos será total, sin respaldos de ningún tipo a dictaduras y autocracias, moleste a quien moleste” y agregó que “Nicaragua necesita democracia, no elecciones fraudulentas ni persecución a opositores”, escribió Boric en su cuenta de Twitter.
Posteriormente en un punto de prensa, el candidato comunista-frenteamplista agregó “yo invito al PC a retractarse del apoyo a la situación que se da en Nicaragua. Lo he conversado con varios militantes del PC y la verdad, están bastante sorprendidos porque ésta no fue una declaración que se haya conversado al interior del partido. Y no me cabe ninguna duda que la mayoría de los compañeros y compañeras del PC no están de acuerdo con lo que se emitió ahí”.
En este escenario apareció de pronto el presidente del PC, Guillermo Teillier, diciendo, para «ayudar» un poquito al candidato presidencial de la extrema izquierda que «la política exterior en el gobierno de Apruebo Dignidad será responsabilidad de Gabriel Boric”.
Y en ese escenario aseguró que “el PC acatará, aunque se expresen diferencias. Pero en esta materia nuestro propósito es llegar al máximo de acuerdos, con disposición a discutir todos sus aspectos”.
Entretanto, la diputada comunista y vocera de Boric, Camila Vallejo, escribió en su cuenta de Twitter: “Esta declaración no fue discutida ni resuelta por la dirección colectiva del partido”.
En esa línea sostuvo que “condenamos las violaciones a los DD HH en Nicaragua, Chile y cualquier parte del mundo. Gabriel Boric será nuestro presidente y él será quien defina la política exterior del gobierno de Apruebo Dignidad”. Declaraciones que fueron compartidas por la diputada Carmen Hertz y el diputado Amaro Labra, informó el diario La Tercera.
Igualmente en la polémica intervino también el alcalde de Recoleta y excandidato presidencial del PC, Daniel Jadue, quien también escribió en su cuenta de twitter: “nunca estaré de acuerdo con regímenes que persiguen y encarcelan a sus opositores. Los problemas de la democracia se resuelven con más democracia, nunca con menos. ¡Aquí no hay dobles lecturas!”
Y también intervino la candidata presidencial (DC) Yasna Provoste para rematar en la polémica: “Es difícil para Gabriel, en una coalición en donde él dice una cosa y sus partidos dicen otra”(Ayúdeme comadre y gracias).
Y finalmente, para rematar con todas, se escuchó la voz del diputado Hugo Gutiérrez: “Lo que está diciendo el Partido Comunista y otros movimientos sociales es que repudia la declaración del gobierno de Piñera, que desconoce la elección que ocurrió en Nicaragua, esa es la opinión del Partido Comunista y otros movimientos sociales, no está opinando en contra del candidato Boric, que tendrá su opinión”.
Asimismo, mencionó: “Nosotros estamos diciendo que es una insensatez de parte de este gobierno, que está de salida, haber dicho que desconocía lo que ocurrió en las elecciones recientes en Nicaragua. Boric tiene su opinión, el Partido Comunista tiene su opinión, eso demuestra que somos partidos distintos, pertenecemos a movimientos distintos que nos hemos unido, nos hemos aliado justamente para encontrar puntos en común”.
Lo que dijo el Gobierno el lunes es precisamente lo que ocurrió:

Canciller Andrés Allamand
“Ayer tuvo lugar un acto electoral en Nicaragua, el que careció de todas las condiciones para ser estimado válido y transparente. La jornada ocurrió “en el contexto de graves violaciones a los derechos humanos, encarcelamiento de líderes y candidatos opositores, represión de los partidos independientes, persecución sistemática a los líderes y organizaciones de la sociedad civil, ausencia de observadores internacionales y bloqueo a los medios de comunicación”, comienza el comunicado.
Y con estos antecedentes a la vista agregó: “El Gobierno de Chile rechaza y no reconoce la legitimidad de las elecciones realizadas en Nicaragua, las que apuntan a eternizar a Daniel Ortega y Rosario Murillo en el poder consolidando un régimen dictatorial”.
Para el PC con la declaración oficial chilena “el gobierno comete un nuevo error al desconocer el proceso electoral de la República de Nicaragua, realizado el domingo 7 de noviembre de 2021. ¿Qué viene ahora, la ruptura de relaciones? Un asunto es disentir de un proceso, y otra es sumarse a los dictámenes del gobierno de los Estados Unidos, cuya injerencia en contra de la voluntad de los pueblos es práctica usual en el mundo entero”.
Sobre democracia pura no se hablo en ninguna de las declaraciones de la extrema izquierda. ¡Qué preocupante!