El conflicto mapuche se agrava también en Argentina tras un incendio que destruyó el Club Andino Pilitriquitrón de El Bolson, en Río Negro, región afectada fuertemente por las violentas acciones mapuches, afectando a varios municipios, entre otros, al de Bariloche.
El intendente de San Carlos de Bariloche, Gustavo Gennuso, reprochó en duros términos una carta del presidente argentino Alberto Fernández que le enviara a la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, en respuesta al reclamo de asistencia en seguridad ante la ola de violencia promovida por movimientos mapuches radicalizados.
“Me pareció terrible la carta. Demuestra el grado de indefensión en el que estamos. Me parece una falta de respeto al federalismo en nuestro país”, dijo Gennuso, en declaraciones a Cadena 3. “Es como decirle a un vecino que se haga cargo del problema de uno”.
Fernández le envió esta mañana una carta a Carreras, que hizo pública, en la que prometió ayuda, pero le pidió que sea el gobierno provincial el que garantice la seguridad en la región andina de la provincia, afectada por ataques incendiarios y amenazas de agrupaciones que reclaman quedarse con tierras privadas o fiscales.
“Estamos cansados de que se nos gobierne desde la capital y por gente que no entiende lo que pasa en el país”, se quejó Gennuso, «ya que cualquier hecho violento no solo es repudiable, sino que tiene que ser investigado y se tiene que actuar para que no vuelva a suceder”, insistió la autoridad austral.
La gobernadora Arabela Carreras había reclamado auxilio de las fuerzas federales después del incendio de la sede del club andino que incluyó una amenaza expresa contra ella. Dijo que no pedía, sino que exigía la intervención nacional. Fernández le respondió en su carta que “es la propia Ley 24059 de Seguridad Interior la que define que las fuerzas federales y provinciales actuarán en conjunto cuando se encuentren empeñadas en el restablecimiento de la seguridad interior”. Pero consideró que “no es este el caso ni mucho menos”, por lo que consideró “aconsejable que, en uso del poder de policía que le otorga la Constitución de Río Negro, se pueda formar un cuerpo específico que se ocupe de los refuerzos del control y mayor seguridad en el futuro”.
El intendente de Bariloche, uno de los municipios más afectados por la violencia, dijo que “la gobernadora se ha hecho cargo” y defendió también a la justicia rionegrina. “Ha actuado mucho más consistentemente que la Justicia Federal. ¿Por qué en Villa Mascardi seguimos con tantos años de ocupación? (localidad de Río Negro). El gobierno nacional deja hacer, y en el dejar de hacer sigue creciendo esta situación”, lamentó Gennuso. Agregó que “el Gobierno no se toma el problema seriamente” y por eso se complica la solución, calificando la carta de Fernández a la Gobernadora Arabela Carreras de “falta de respeto”.
El mandatario argentino dijo en la nota que “no es función del gobierno nacional reforzar el control de las rutas nacionales o brindar seguridad en la región”, según el diario La Nación de Buenos Aires.
En la misma línea, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, le dijo a Carreras: “Señora, está equivocada, no tiene ninguna atribución” para exigir el envío de Gendarmería.
Según la agencia noticiosa argentina Infobae, los integrantes de la agrupación identificada con las siglas RAM son los principales sospechosos del ataque al que el Gobierno de Río Negro denunciará como “terrorismo”. El grupo es liderado por el convicto Facundo Jones Huala quien cumple una condena en Chile por ataques similares.
Justamente su figura siempre ha generado reacciones en el país transandino. El embajador argentino en Chile Rafael Bielsa fue fuertemente criticado en su país por participar recientemente en una audiencia judicial en la que se debatía un pedido para que el extremista mapuche pudiera recuperar su libertad.
La figura de Jones Huala siempre ha generado reacciones en Argentina. Durante 2017 y 2018 su nombre resonó fuerte debido a una serie de episodios incendiarios en en sur del país transandino.
La RAM se adjudicó el ataque al campamento de Vialidad Provincial, sin mencionar el incendio que afectó parcialmente el centro de informes turísticos de El Bolsón. La RAM se autodefine como “el brazo político militar de las Lof en conflicto” en la región. Depende del Movimiento Mapuche Autónomo del Puelmapu.
En el ataque una pareja fue maniatada y los autores dejaron escritos con amenazas a la mandataria rionegrina y a funcionarios judiciales.
“Venimos a reivindicar la acción de sabotaje realizada en la noche del 3 de octubre en inmediaciones del camino al cerro Catedral” expresó la RAM, a través de un comunicado de prensa que fue remitido a los medios de comunicación, haciendo mención al ataque al campamento de Vialidad, el cual presta servicio a la “industria turística de la clase alta, la burguesía de Bariloche y es financiado por grandes capitalistas y con respaldo del poder político”.
La Resistencia Ancestral Mapuche opera desde hace más de 10 años en la Patagonia, tanto en Argentina como en Chile, con numerosos ataques en las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut, y en varias provincias trasandinas.
Los distintos delitos que comete la RAM responden a un mismo objetivo político, que es promover una lucha insurreccional contra el Estado argentino y la propiedad privada de la tierra. La RAM considera que el estado argentino y sus leyes son ilegítimos.
El primer incidente registrado y atribuido a la RAM fue en el año 2009, cuando un grupo de personas rompió los vidrios de una estación de servicio en la ciudad de Esquel (Chubut), en oposición a las “inversiones capitalistas petroleras”.
Desde ese episodio protagonizó innumerables ataques terroristas y vandálicos en Argentina y Chile, cada vez con mayor frecuencia, aunque la extradición a Chile de Jones Huala – condenado por un atentado incendiario ocurrido en 2013 contra el fundo Pisú Pusé, en Valdivia- apaciguó lo episodios violentos.
Ataque a Gendarmería
Luego del ataque al campamento de Vialidad Provincial, instalaciones de Gendarmería Nacional en El Bolsón fueron blanco de otro atentado. Las instalaciones del área Sanidad de esa fuerza federal fueron atacadas por supuestos integrantes de la misma comunidad mapuche, donde dejaron banderas con inscripciones mapuches.