La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, aseguró en un foro de mujeres en política que si no hubiese sido ministra de defensa durante el gobierno de Ricardo Lagos jamás hubiese sido presidenta de Chile en dos períodos.

En una actividad, organizada por Americas Society Council of the Americas (AS/COA) la exmandatari hizo esta declaración. En la reunión participaron también  Epsy Campbell Barr, vicepresidenta de Costa Rica y de María Eugenia Vidal, exgobernadora de la Provincia de Buenos Aires en Argentina.

Durante el debate y al abordar el escenario que enfrentan las mujeres que quieren entrar a la política, Bachelet se sinceró respecto a lo que fue su propia experiencia.

“Probablemente, si yo no hubiera sido ministra de Defensa jamás hubiera estado en la retina de la población chilena para ser una candidata a la Presidencia y si no hubiera estado en la retina de la población chilena, jamás mi partido me hubiera llevado como candidata a la Presidencia, siendo yo miembro del Comité Central, de la comisión política de mi partido, teniendo una larga historia política”, sostuvo la histórica militante del Partido Socialista.

En ese sentido, la Alta Comisionada  de la ONU, agregó que “yo tuve grandes dificultades al comienzo. Más que de discutir mis ideas se preocupaban de cómo me vestía, de si el zapato se me quedaba enterrado en no sé dónde, de si se soltaba alguna cosa del chaleco”.

Bachelet reforzó la importancia de que más mujeres entren en política y la existencia de planes de ayuda para guiarlas en dicho proceso.

“Yo en mi partido siempre me enojaba porque las mujeres solo hablaban de temas de mujeres. Y cuando estábamos en reuniones de mujeres, yo les decía ‘ustedes tienen que hablar de economía, relaciones internacionales, de Defensa, porque si no es ‘ah, una vez más mujer hablando de temas de mujeres’’”, indicó.

Después que Michelle Bachelet fuera electa la primera vez (gobernó entre 2006-2010) , el historiador Alfredo Jocelyn-Holt, en otro foro y tras haber ocupado ya el cargo de ministra de defensa del presidente Ricardo Lagos Escobar, le preguntó de si ella era un “carta tapada de los militares”, como publicó en la época el periódico The Clinic, tras esbozar una respuesta se rompió en llanto (su padre el general de aviación  Alberto Bachelet Martínez ​ fue torturado y aesinado por el régimen militar de Augusto Pinochet.

Sin embargo, la reacción de Bachelet, el llanto, era muy rara y hasta insólita, tomando en cuenta que ella precisamente tenía una fuerte relación con el generalato. Y no solo por ser hija, sobrina, amiga y conocida de múltiples generales.

Ya había sido ministra de Defensa y se había transformado, desde mucho tiempo antes, en experta en temas militares, tomando cursos en la ANEPE (Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégico) en 1996, y estudiando en Colegio Interamericano de Defensa (CID), en el Fuerte Lesley J. McNair, EEUU.

Bachelet nunca respondió la pregunta del historiador, y se limitó a contestar la primera parte de la misma sobre si ella era un producto del «marqueteo», argumentando que su candidatura no era “un accidente de tránsito».