El ministro de Justicia, Hernán Larraín, confirmó que el machi depondrá la huelga de hambre que sostuvo por 107 días. «Siempre el diálogo se prefiere a la violencia, al conflicto y al enfrentamiento», sostuvo este martes.
Así el Gobierno de Sebastian Piñera logró ingresar a una nueva etapa en el conflicto histórico de los políticos chilenos con el pueblo mapuche, concentrado especialmente en la Región de Araucanía en el sur chileno.
Larraín, confirmó que el Ejecutivo había logrado llegar a un acuerdo con el machi Celestino Córdova, (foto derecha) quien depondrá la huelga de hambre. “ Acabo de terminar una conversación con el machi Celestino Córdova, quien me ha manifestado que ha aprobado la propuesta que ha hecho el gobierno para resolver esta situación y así deponer la huelga de hambre», anunció al respecto el secretario de Estado, quien detalló que «como un gesto hacia la condición espiritual del machi, se le ha autorizado una salida al rehue de hasta 30 horas para renovar sus energías conforme su espiritualidad».
Además de este acuerdo, la portavoz de Córdova informó que se había restablecido la mesa de diálogo con el Gobierno.
El titular de Justicia valoró la decisión de Córdova, «en particular porque nos preocupa siempre la salud de las personas que toman este camino. Las huelgas de hambre causan deterioro en la salud, y para el Estado, que tiene la custodia de estas personas, es un primer deber el de preocuparse de que estas personas tengan la salud y cuiden su vida como corresponde, por eso, para nosotros es motivo de satisfacción que se haya puesto término a esta huelga de hambre».
“Pensamos que sobre todo en una zona como la de La Araucanía, donde hay tanta complejidad, tantos conflictos que se arrastran históricamente, dan una señal en un ámbito circunscrito como en el tema penitenciario, de que es posible a pesar de las diferencias y de las discrepancias, encontrar acuerdos», agregó el ministro Larraín.
«Para alcanzar la paz, el único camino posible es el del diálogo y nosotros no creemos en la violencia. Creemos que construir un estado de derecho democrático supone dialogar», enfatizó Larraín, destacando además que «en lo fundamental, esta propuesta procura mejorar las condiciones de la permanencia de personas privadas en libertad pertenecientes al pueblo mapuche y originarios para que sientan el respeto de vida incluso en condición penitenciaria».
La paz se alcanza por el diálogo
El secretario de Estado enfatizó que, «para alcanzar la paz, el único camino posible es el del diálogo. Nosotros no creemos en la violencia, creemos que construir un Estado de Derecho democrático supone superar las diferencias por el camino del diálogo».
«El diálogo supone respeto, buena fe, generar confianza, para así poder ir construyendo puentes que permitan resolver los problemas», recalcó Larraín.
«Ha sido muy importante este proceso de escucha, de respeto, de buena disposición, para así avanzar y construir una propuesta que ha sido elaborada en un proceso donde hemos podido escuchar a mucha gente, que nos ha permitido dar una solución (…) Así creemos que se construyen los países: a veces por el camino largo del diálogo, pero que es el único que finalmente da frutos», reafirmó.
Larraín indicó que, sin perjuicio del acuerdo firmado con Celestino Córdova, siguen adelante las conversaciones con los otros presos mapuche que están en huelga de hambre en Angol y Lebu: «Esperamos ojalá muy luego poder también alcanzar una solución que les resulte satisfactoria».
En este punto, admitió que parte del problema en la macrozona sur «tiene que ver con demasiados años acumulados de desconfianza y falta de reconocer la especificidad cultural de los pueblos originarios, en este caso del pueblo mapuche, en nuestras instituciones».
«Es cierto que el machi quiso que le autorizaran cumplir su pena en el rehue, pero, como lo hemos señalado, eso no está dentro de nuestra competencia y los tribunales ratificaron que eso no era posible». La solución alcanzada, destacó el ministro, no pasa a llevar sentencias judiciales y, desde ese punto de vista, tampoco supone estar avalando una desigualdad ante la ley, cerró.
Desde el Colegio Médico, su presidenta Izkia Siches destacó el acuerdo alcanzado, agradeciendo «el trabajo comprometido de las entidades que han contribuido a ello, entre ellos, nuestro Vicepresidente Dr. Patricio Meza y Departamento de Derechos Humano».
A su vez, el director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Sergio Micco, valoró el acuerdo alcanzado «que se debió a la buena fe con la que actuaron todos los que participaron en este diálogo».
«El INDH, junto con el Colegio Médico y la Oficina Regional para América Latina de la Alta Comisionada de Derechos Humanos, seremos garantes de este acuerdo. Sin embargo, todo no nos debe hacer olvidar un conjunto de incumplimientos de los DD.HH. que existen en las relaciones del Estado y la sociedad chilena y los pueblos indígenas, relativos a la no discriminación, a la participación política, a los derechos territoriales, lingüisticos y culturales, los cuales hay que abordar en su integridad y en armonía con los derechos de todos», aseveró.
Respecto a los ocho comuneros que llevan más de 100 días en huelga de hambre en Angol, sostienen que su petitorio es más amplio que el que tenía el machi y, por ahora, se mantendrán con la medida de presión.
Según una resolución de la Corte Suprema, Gendarmería está posibilitada para poder trasladarlos al Hospital Intercultural de Nueva Imperial. La defensa de los comuneros remarcó que el traslado no necesariamente implica optar por la alimentación forzosa.
Texto del acuerdo de ocho puntos
1. Tras su decisión de deponer la huelga de hambre, el machi Celestino Córdova permanecerá en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial hasta su plena recuperación física y espiritual, incluyendo orientaciones de medicina mapuche que sean compatibles con la prescripción del agente de salud tradicional tratante, así como su situación de persona privada de libertad, y de esa forma con las condiciones actuales del Reglamento de Establecimientos Penitenciarios.
2. Recuperada su salud en los términos señalados anteriormente, el machi Celestino Córdova puede ser trasladado a un Centro de Educación y Trabajo (CET) por cumplirse los requisitos exigidos para ello, si él así lo requiriera, para lo cual debe postular. Una vez en el CET podrá acceder a los derechos que la regulación de estos centros permite.
3. Una vez que el machi Celestino Córdova se encuentre en el Centro de Educación y Trabajo, se autorizará una salida al rewe. Dicha salida podrá extenderse hasta por un máximo de 30 horas y se sujetará a las condiciones impuestas por las autoridades sanitarias y penitenciarias.
4. Respeto de las personas privadas de libertad actualmente en huelga de hambre, y considerando la resolución dictada por Gendarmería, al momento de que ellas depongan la huelga, no serán objeto de sanción disciplinaria por parte de Gendarmería de Chile.
5. En el mismo sentido del compromiso anterior, se facilitará la postulación de personas privadas de libertad de pueblos originarios a Centros de Educación y Trabajo, si así lo solicitan, en virtud de los cambios introducidos por la resolución n° 3925 de Gendarmería de Chile.
6. Se facilitará, a través de la Defensoría Penal Pública, la solicitud de revisión de medidas cautelares (de prisión preventiva a, por ejemplo, arresto domiciliario).
7. Con la finalidad de avanzar en la incorporación de criterios de pertinencia cultural en los establecimientos penitenciarios, se establecerán módulos especiales para pueblos originarios en establecimientos donde exista un número adecuado de privados de libertad en dichos pueblos que justifique su implementación (por ejemplo las cárceles de Temuco y Angol), a fin de habilitarse especialmente para el desarrollo de actividades laborales, educacionales y espirituales, con el apoyo de personas externas al centro que colaboren con una mejor ejecución de un programa de reinserción con pertinencia cultural.
8. Se continuará con el desarrollo de Diálogos Interculturales Penitenciarios, con el propósito de arribar a una propuesta de modificación de los reglamentos penitenciarios (Reglamento 518 sobre Establecimientos Penitenciarios, Reglamento 943 que establece el Estatuto Laboral, Reglamento 703 sobre Asistencia Religiosa en Establecimientos Penitenciarios, entre otros), a fin de profundizar la debida pertinencia cultural en la reinserción laboral y educacional, y la atención en materia de salud (acceso a machi e insumos de alimentación) y asistencia espiritual. Esta propuesta deberá formularse dentro del año 2020, sin perjuicio del proceso de Consulta que proceda de acuerdo al Convenio 169.
Malestar en familiares de víctimas
Jorge Luchsinger, hijo de Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, ambos asesinados por el mapuche, cuestionó la huelga de hambre del machi Celestino Córdova.
“Era de público conocimiento las presiones que estaba haciendo este reo condenado y asesino. La verdad es que para nosotros lo más relevante es que la persona que fue condenada cumpla su sentencia así como cualquier otro reo de este país y eso es por lo que hemos peleado en las instancias que corresponde”, expresó Jorge Luchsinger en el canal 24 Horas.
“Cuál es la forma, cuáles son los beneficios carcelarios que tiene, eso la verdad que no es resorte de la familia estar objetando o celebrando si eso es bueno o es malo, creo que fue una presión indebida, pero este tipo de personas tienen un grupo de apoyo bastante grande por lo cual, de alguna forma entiendo que el gobierno estuvo haciendo muchas gestiones para evitar que continuara con su huelga de hambre y tener un desenlace fatal que tampoco hubiese sido bueno”, agregó.
Córdova, que fue condenado por el crimen del matrimonio Luchsinger y Mackay ocurrido en enero de 2013, realizó una huelga de hambre por 107 días exigiendo beneficios penitenciarios vinculados a su condición de autoridad ancestral, en base a los tratados internacionales suscritos por Chile con relación a los pueblos originarios. En 2018 había realizado una protesta similar, logrando que Gendarmería lo autorizara por 48 horas para que pueda visitar su rewe.
Jorge Luchsinger se refirió a la posibilidad de que el sujeto condenado por dar muerte a sus padres acceda a cumplir su pena en un Centro de Educación y Trabajo bajo un régimen semiabierto, señalando que “va a seguir cumpliendo su sentencia en prisión y eso es lo que nosotros esperamos. Ese es un beneficio carcelario que puede ser exigido y entregado a cualquier reo del país cumpliendo ciertas condiciones, no tenemos más comentarios que hacer”.
Además sostuvo que hay “instrumentos internacionales que ha firmado el país y que de alguna forma tienen que cumplirse, pero el convenio 169 (de la Organización Internacional del Trabajo), son recomendaciones y en esas recomendaciones en ninguna parte dice que tienen que las personas, haciendo valer sus creencias o sus cosas, salir a matar y asesinar a otras. En ese sentido creo que uno tiene que aceptar los convenios que ha firmado el país, aunque uno no esté de acuerdo en muchas cosas, más que en las cosas que dice, sino que en la interpretación que se les da en nuestro país, o en algunos grupos de personas a esas recomendaciones”.