El virus agresivo que ataca al mundo llevara este año a muchas empresas de turismo a la quiebra porque el mundo parece haberse paralizado.

Hay miles de kilómetros de fronteras cerrados al viaje y al comercio, y cientos de aviones han quedado varados. Se han paralizado los viajes de intercambio, las exportaciones de carne brasileña, las mudanzas y las vacaciones en crucero.

l sector mundial de turismo y viajes podría perder unos 2,7 billones de dólares por el impacto de la pandemia del coronavirus, que también pone en riesgo cerca de 100 millones de puestos de trabajo, según estimaciones del Consejo Mundial de Viajes y Turismo.

La presidenta del Consejo, Gloria Guevara,  declaró que los disminuidos  viajes de los chinos representan una de las mayores pérdidas, porque ellos son los que más gastan en viajes por el  mundo.

La agrupación del sector privado calcula que el turismo conforma el 10,3 % del producto interior bruto (PIB) mundial.

La situación en Cuba es grave

El ministro de Comerio Exterior y la Inve rsión Extranjera del régimen de Cuba, Rodrigo Malmierca Díaz, advirtió que el impacto del virus  en la isla caribeña es preocupante porque se ve un panorama muy complejo para la economía cubana.

Rodrigo Malmierca Díaz

En el programa de la Mesa Redonda del lunes Malmierca Díaz esbozó una imagen muy negativa para los ingresos del régimen debido a la depresión del turismo, la caída de las exportaciones y los precios del níquel y el azúcar, como publica el portal oficial Cubadebate.

Al mismo tiempo, el vocero del régimen dijo que  «se presentarán problemas con las importaciones, pues un grupo de renglones que necesita el país están siendo preservados por las naciones productoras en su propio beneficio».

Trataremos de evitar que, en el caso de los alimentos, haya problemas para la población cubana”, especialmente por el incremento de los precios y dio como ejemplos el de la leche en polvo que subió un 15% y el del arroz, un 18%.

El ministro del régimen calificó estas cuestiones como problemas objetivos a los que el Gobierno tendrá que enfrentarse.

«En primer lugar no vamos a renunciar a nuestro derecho al desarrollo económico y social; aún en esta situación compleja vamos a seguir trabajando con mentalidad optimista y al mismo tiempo realista», dijo.

Durante la crisis económica de los años 90 el país enfrentó una escasez generalizada de productos y recursos como el combustible que vino aparejada de prolongados apagones diarios en el sector residencial.

«Nuestra economía es muy abierta y depende mucho del comercio exterior, por lo que se debe trabajar en función de exportar, sustituir importaciones sobre todo en lo referido a alimentos y energía, y mantener todos los esfuerzos por atraer la inversión extranjera», dijo Malmierca Díaz.

En medio de la actual situación, el régimen ve varias «oportunidades favorecedoras» como el desarrollo de la industria biofarmacéutica cubana.

En tal sentido Malmierca puso el foco en productos como el Interferón Alfa 2b, el cual «abre posibilidades a nuevas oportunidades para la exportación, así como los servicios médicos».