Fueron diez meses de gobierno en interinato, dos elecciones generales y casi cuatro años de mandatos en remojo que España intenta dejar atrás desde esta semana, con la investidura del socialista Pedro Sánchez como presidente en propiedad.
Se trató de una etapa sumamente difícil, quizás la más crítica desde el regreso de la democracia, que ha visto de manera inquietante para su integridad territorial la exacerbación del desafío independentista catalán y, luego, el auge del movimiento de extrema derecha Vox, que ya es la tercera fuerza política, como editorializó el diario «El Tiempo» de Bogotá.
Todo en una sucesión de hechos que demuestran que, al final, los mecanismos de la democracia funcionaron para romper un traumático bloqueo, pero que sin duda imponen hacer ajustes que respondan a una nueva realidad política, no la del bipartidismo tradicional, sino la de la irrupción de otras fuerzas como la izquierda radical de Podemos (con Pablo Iglesias) que precisamente firmó la inédita coalición con la que Sánchez logró salir avante en la segunda votación en el Parlamento, la primera en España desde el fin de la dictadura de Franco, en 1975.
Una vicepresidencia y cuatro ministerios son un gran botín para el partido heredero del movimiento de los indignados, en 2011, pero que hoy, cumplido el objetivo de pasar de la oposición al Gobierno, debe mostrar madurez y pragmatismo, más allá de la propaganda o la ideología.
El nuevo gobierno deberá instalar pronto una mesa de diálogo con los catalanes para ‘encauzar el conflicto político’ y lograr una solución duradera sin que España pierda una rica región.
Sánchez fue investido con una muy apretada votación de 167 votos a favor y 165 en contra. Pero lo realmente clave fue la abstención de la independentista Izquierda Republicana de Cataluña (ERC – Esquerra Republicana de Catalunya), pues en la segunda votación a Sánchez le bastaba con tener solo más votos a favor, no la mayoría absoluta que requería la primera, que perdió el domingo.
Por eso, en el marco del acuerdo para permitir la investidura, el nuevo gobierno deberá instalar en un par de semanas una mesa de diálogo con los catalanes para “encauzar el conflicto político” en la rica provincia. En el trasfondo permanecen las sentencias del Tribunal Supremo, que tiene tras las rejas a nueve líderes separatistas condenados a largas penas por el intento de secesión de Cataluña en 2017.
Y el otro tema que pondrá ERC sobre la mesa será, por supuesto, la autorización para celebrar un referendo de autodeterminación en Cataluña, toda una papa caliente para el Ejecutivo, pues necesitaría adelantar una reforma constitucional para la cual no tiene los votos.
Pero Cataluña no es la única urgencia. Será clave sacar adelante la ley de Presupuestos Generales, que, además, está relacionada con las reformas fiscales propuestas. Bien lo sabe Sánchez, pues el rechazo de la oposición a las cuentas del Ejecutivo socialista de 2019 desembocó en la disolución del Parlamento y el adelanto de elecciones.
Otras medidas, como la subida paulatina del salario mínimo interprofesional, la reforma laboral y pensional, serán determinantes, aunque se sabe que la oposición de derechas no piensa darle cuartel a un gobierno que, si bien nace débil y con apoyos contados, es un gran primer paso para recuperar el tiempo perdido.
El nuevo Gobierno
El primer Gobierno de coalición en España de la etapa democrática que se abrió en 1978 estará formado por 4 vicepresidentes y, al menos, 17 ministros. A falta de la confirmación oficial de las personas que ocuparán las carteras de Justicia y Cultura, esta es la composición del nuevo Ejecutivo:
Presidencia
Pedro Sánchez
Pedro Sánchez (Madrid, 47 años) ha vivido el último lustro como un superviviente: desde su llegada a la secretaría general del PSOE a la accidentada salida y el posterior regreso para acabar siendo investido presidente con una moción de censura y renovar su cargo tras la convocatoria de dos elecciones. Al frente del primer Ejecutivo de coalición de la última etapa democrática española, ha diseñado un Consejo de Ministros de marcado perfil económico.
Vicepresidencias
Carmen Calvo: ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática
Doctora en Derecho Constitucional y número dos de Pedro Sánchez, Carmen Calvo (Cabra, Córdoba, 62 años) ha tenido un papel muy activo en las negociaciones para el acuerdo de Gobierno, especialmente con ERC. Mantiene la vicepresidencia, aunque pierde las competencias de Igualdad, que se integran en un ministerio dirigido por Irene Montero.
Pablo Iglesias: Derechos Sociales y Agenda 2030
Politólogo y profesor universitario, Pablo Iglesias (Madrid, 41 años) ocupará la vicepresidencia segunda del Ejecutivo, de la que dependerán dos áreas: Derechos Sociales y Agenda 2030. Según ha admitido el secretario general de Podemos, su “mayor miedo” es “decepcionar a los suyos” por un programa “muy moderado” pactado con el PSOE.
Nadia Calviño: Economía y Transformación Digital
Economista y abogada, Nadia Calviño (A Coruña, 51 años) ha sido directora general de la Comisión Europea y ministra de Economía con Sánchez. Su gran prestigio e influencia en el Eurogrupo han facilitado que la Comisión Europea aceptase el programa de estabilidad presentado por España para los próximos Presupuestos.
Teresa Ribera: Transición Ecológica y Reto Demográfico
Teresa Ribera (Madrid, 50 años) es una de las mayores expertas en negociaciones internacionales contra el calentamiento global. Directora de la Oficina Española de Cambio Climático de 2004 a 2008 y entre 2008 y 2011, Ribera ostentará una vicepresidencia en una de las áreas prioritarias para el Ejecutivo de coalición: la lucha contra el cambio climático.
Ministerios
Arancha González Laya: Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación
Arancha González Laya (Tolosa, 50 años) ha sido subsecretaria general de la ONU y directora ejecutiva del Centro de Comercio Internacional (ITC). Trabajó en la Organización Mundial del Comercio (OMC). También ha desempeñado varios cargos en la Comisión Europea en el ámbito de las relaciones internacionales, el comercio, la comunicación y la cooperación al desarrollo.
Ministerio de Justicia: sin asignar
Margarita Robles: Defensa
Magistrada del Tribunal Supremo, Margarita Robles (63 años) se ha mantenido siempre fiel a Pedro Sánchez, incluso en sus momentos más dramáticos. Cuando el presidente ganó por segunda vez el liderazgo del PSOE, la nombró portavoz parlamentaria y, después, ministra de Defensa, cargo que ahora revalida.
María Jesús Montero: portavocía y Hacienda
Licenciada en Medicina y Cirugía, María Jesús Montero (Sevilla, 53 años) ha trabajado en varios cargos relacionados con la gestión hospitalaria. Antes de ser ministra en el primer Ejecutivo de Sánchez, ocupó la cartera de Hacienda del Gobierno andaluz de Susana Díaz, con quien guarda una estrecha relación. En el PSOE de Andalucía muchas miradas están puestas en Montero desde que los socialistas perdieron la Junta.
Fernando Grande-Marlaska: Interior
El mediático juez conservador que destapó el chivatazo a ETA volverá a ocupar la cartera de Interior. Fernando Grande-Marlaska (Bilbao, 57 años) llegó a la Audiencia Nacional en 2004, donde sustituyó a Baltasar Garzón. En 2012 se convirtió en presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional y, en 2013, en vocal del Consejo General del Poder Judicial a propuesta del PP. Desde que hizo pública su homosexualidad en 2006 se ha destacado como un activista por los derechos del colectivo LGTBI.
José Luis Ábalos: Transporte, Movilidad y Agenda Urbana
El secretario de Organización del PSOE volverá a ocupar la cartera de Fomento, rebautizada ahora como Transporte, Movilidad y Agenda Urbana. Al contrario que en la investidura fallida de julio, en la que tuvo un perfil bajo, José Luis Ábalos (Torrent, Valencia, 62 años) ha desempeñado un rol notorio en el equipo negociador con ERC. Político muy cercano a Pedro Sánchez, coordinó la presentación de la moción de censura que el líder socialista ganó en 2018.
Isabel Celáa: Educación
La trayectoria política de Isabel Celáa (Bilbao, 70 años), que conserva la cartera de Educación —aunque no la portavocía del Gobierno—, ha estado unida a este rubro desde 1987. Licenciada en Filología Inglesa, Filosofía y Derecho, fue la consejera de Educación, Universidades e Investigación del Gobierno socialista de Patxi López en el País Vasco.
Yolanda Díaz: Trabajo
Abogada laboralista y afiliada al Partido Comunista desde muy joven, Yolanda Díaz (Fene, A Coruña, 48 años) procede de una familia de históricos sindicalistas. Fichó a Pablo Iglesias mucho antes de que la propusiera como ministra de Trabajo: en 2012 le contrató como asesor de AGE (Alternativa Galega de Esquerda) para las elecciones gallegas, un grupo precursor de las confluencias de Podemos.
José Luis Escrivá: Seguridad Social, Inclusión y Migraciones
Jose Luis Escrivá (Albacete, 59 años) ha sido el pepito grillo de los ministros de Hacienda y los consejeros regionales de Finanzas desde que en 2014 comenzó a dirigir la Airef, acrónimo de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal. En 2013, el entonces ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, le encargó crear esta institución, que fue impuesta a España por la troika tras el dramático rescate financiero de 2012. Escrivá amenazó con dimitir hasta en cinco ocasiones para asegurar su autonomía.
Reyes Maroto: Industria, Comercio y Turismo
Licenciada en Económicas y profesora asociada del Departamento de Economía de la Universidad Carlos III, Reyes Maroto (Medina del Campo, Valladolid, 46 años) repite cartera. Se labró fama de minuciosa y dialogante en sus tres años como diputada socialista en la Asamblea de Madrid. Fue también secretaria de Desarrollo Sostenible del PSOE-M y portavoz de Presupuestos, Economía, Empleo y Hacienda.
Luis Planas: Agricultura, Pesca y Alimentación
Licenciado en Derecho, Luis Planas (Valencia, 67 años), repite al frente de la cartera de Agricultura. También tiene las competencias de Política Territorial desde que Meritxell Batet, antigua ministra de este ramo, fue elegida presidenta del Congreso. Cuando asumió el cargo estaba siendo investigado en una causa sobre el robo de agua en Doñana a través de pozos ilegales, aunque pronto fue desimputado.
Irene Montero: Igualdad
Licenciada en Psicología, Irene Montero (Madrid, 31 años) pasó por las juventudes comunistas y por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) antes de ingresar en Podemos. Tras el congreso de Vistalegre II, que fraccionó el partido, sustituyó a Errejón al frente de la portavocía parlamentaria.
Ministerio de Cultura: sin asignar
Salvador Illa: Sanidad
El secretario de organización del PSC, Salvador Illa (La Roca del Vallés, Barcelona, 53 años), será el nuevo ministro de Sanidad. Illa formó parte del equipo negociador socialista en las conversaciones con ERC para lograr su abstención en la investidura. Profesor asociado de Economía de la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales Blanquerna, ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en el sector público y en la actividad política.
Alberto Garzón: Consumo
El líder de IU, el economista Alberto Garzón (Logroño, 34 años), es militante del PCE y orgulloso defensor del comunismo. Su libro Por qué soy comunista, publicado en 2017, no deja lugar a dudas. Es también un convencido republicano: La tercera república es otro de sus seis títulos publicados. Siempre se refiere al Rey como “el ciudadano Borbón”.
Pedro Duque, ministro de Ciencia e Innovación
Pedro Duque (Madrid, 56 años) repetirá en el cargo de ministro de Ciencia e Innovación, pero pierde la competencia de Universidades. Ingeniero aeronáutico, en 1992 la Agencia Espacial Europea le eligió para formar parte de su primer equipo de astronautas. En el tiempo que ha estado al frente del ministerio ha tenido que hacer frente a la noticia de que compró un chalé a través de una sociedad que tenía a su nombre y el de su esposa
Manuel Castells: Universidades
Manuel Castells (Hellín, Albacete, 77 años) es un referente mundial en el estudio de la sociedad de la información. Investigador incansable, no ha dejado de publicar libros y trabajos científicos mientras ejercía como asesor de todo tipo de organismos internacionales, desde la Unesco a la Comisión Europea, así como de numerosos Gobiernos. Es autor de 26 libros, coautor o editor de otros 22 y doctor honoris causa por 18 universidades europeas.