La final de la Copa Libertadores entre Flamengo y River Plate fue trasladada este martes a Lima, Perú, desde Santiago de Chile debido a los continuos disturbios en la capital chilena, anunció Alejandro Domínguez, Presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) en su sede en Luque, Paraguay.
El encuentro estaba programado en el estadio Nacional de Santiago para el 23 de noviembre, pero en las últimas semanas el escenario de multitudinarias protestas no da suficiente seguridad para celebrar el vento deportivo en la capital chilena.
La fecha se mantiene y el duelo se celebrará en el estadio Monumental de Lima en la misma fecha.
Representantes de ambos finalistas y de las asociaciones de fútbol argentina y brasileña se reunieron en la sede de Conmebol durante casi cinco horas antes de decidir que el juego ahora tendrá lugar en la capital peruana.
«Entendemos que la opción más viable para todos, y con garantías del Gobierno peruano, es que el juego se realice en Lima», dijo Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol.
Este es el tercer gran evento que es cancelado en Chile debido a las protestas ciudadanas. La semana pasada, el presidente chileno Sebastián Piñera anunció que el país no será sede de la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que estaba prevista para el 16 y 17 de noviembre, y tampoco la conferencia contra el cambio climático COP25, que se iba a realizar del 2 al 13 de diciembre.
Desde que comenzó la crisis el 18 de octubre, millones de chilenos han marchado contra la desigualdad en lo que se han convertido en las mayores protestas vistas en Chile desde el regreso del país a la democracia en 1990.
Agreguemos la cancelación del Concurso Internacional de Ejecución Musical, mención piano, que se efectuaría en Noviembre en Viña del Mar y muy probablemente la Teletón de este año.