El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes que vendría a Chile en noviembre a participar en el Foro Económico Asia Pacífico (APEC), ocasión en que firmaría en la capital chilena un nuevo acuerdo comercial con China al que estaría llegando por estos días con el Gobierno de Beijing y que superaría los obstáculos que por esta causa tiene el comercio mundial desde hace quince meses y que ha amenazado con derrumbar la economía global.

Trump dijo que Estados Unidos y China empiezan a cerrar pactos en aspectos en los que ya hay camino avanzado, para así tratar de frenar la actual guerra arancelaria. Hasta ahora se trata de un acuerdo preliminar que quedaría aún lejos del gran tratado comercial que buscaba el presidente de EE UU.  El anuncio lo hizo en presencia del viceprimer ministro chino, Liu He.

Se trata de un primer paso, que evita una escalada del litigio como sucedió tras la reunión de alto nivel hace más de dos meses. Trump lo definió como “un acuerdo sustancial en la primera fase” y explicó que llevará tres semanas poner el pacto por escrito. Incluye acuerdos en materia de propiedad intelectual, servicios financieros y tipo de cambio, así como compras de productos agrícolas estadounidenses por valor de 50.000 millones de dólares.

Trump puso especial atención a la cuestión de las compras de productos agrícolas por parte de China, tema muy sensible electoralmente y que lo podría favorecer para su reelección el próximo año . “La pregunta es -acotó Trump- si nuestros agricultores van a estar a la altura de producir tanto”, comentó, “pido a los agricultores que compren más tierras y tractores”. Explicó que actualmente estas compras rondan los 8.000 millones anuales y que en el máximo fueron 16.000 millones, “nunca hubo un acuerdo de esta magnitud”.

La consecuencia inmediata es que no entrará en vigor el aumento de aranceles previstos para el próximo martes 15 de octubre, que ya fue aplazado hace tres semanas. “La segunda fase” de la negociación, añade Trump, “comenzaría de inmediato cuando el primer pacto preliminar esté firmado”. Citó incluso una tercera fase. Trump se limitó a decir que se registraron progresos en el ámbito de las transferencias tecnológicas, uno de los puntos más espinosos.

Si el nuevo pacto está escrito en tres semanas, Trump lo firmaría en Santiago de Chile en noviembre, durante la Apec donde se encontrará con el  presidente chino Xi Jinping.

El presidente destacó que lo bueno del nuevo acuerdo es que no sería necesario pasar por el largo y complejo proceso de ratificación en el Congreso, como está sucediendo con el nuevo tratado de libre comercio con México y Canadá. “Cuando el acuerdo esté plenamente negociado”, ha señalado, “lo firmaré yo mismo en nombre del país. Rápido y limpio”, lo que podría ocurrir en Chile.