Si bien hubo ya un contacto directo entre el ministro de justicia Hernán Larraín con el magistrado Mario Carroza por el caso del Comandante Ramiro,  que fue criticada duramente por algunos sectores políticos al acusar al secretario de Estado de estar interviniendo en este caso en cuestiones absolutamente reservadas al Poder Judicial, el mismo ministro afirmó este viernes que la condena que debe cumplir Mauricio Hernández Norambuena,  por el crimen del senador Jaime Guzmán, es materia del Poder Judicial y no del Gobierno.

De este modo, da un paso atrás, puesto que el martes afirmó que el recién extraditado debía cumplir 27 años de cárcel.

De acuerdo a lo señalado por el secretario de Estado, la condena ya existe y fue “impuesta por los tribunales chilenos hace un tiempo»,  que son dos condenas perpetuas simples.

Sin embargo, respecto de los años que debe cumplir, sostuvo que “lo único que hemos hecho es explicar los efectos que tiene la extradición por la aplicación de un tratado”. Admitió en esa línea que “será el ministro Carroza y la Corte Suprema que decidirán sobre esta materia”.

Asimismo, destacó que Hernández Norambuena “es la primera persona, que habiéndose fugado de forma inédita de la cárcel de alta seguridad de Santiago, ha sido recapturado y cumple su pena”.

La discusión radica en que para la defensa del condenado, los 17 años de prisión que el Comandante Ramiro cumplió en Brasil deben abonarse en Chile, lo que es rechazado por el Gobierno, que se inclina por los 27 años.

Al respecto, el ministro Mario Carroza sostuvo que “ese abono es discutible y quien va a tener que decidir soy yo”.

Primer interrogatorio

Uno de los temas que se tocó esta semana después de concretarse la extradición del ex «comandante» del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, en un primer interrogatorio con el ministro Mario Carroza,   fue su extradición desde Brasil, país en el que cumplió 17 años de presidio por el secuestro del publicista Washington Olivetto. En total, llevaba 20 años de presidio si se suman los 3 que alcanzó a estar encarcelado en Chile, antes de protagonizar una fuga cinematográfica desde el penal de alta seguridad.

Precisamente, la condición que puso Brasil a Chile para extraditarlo es que no recibiera una pena mayor a la estipulada en su legislación, que es de 30 años. Por eso, el debate en Chile es si el Comandante «Ramiro» tiene que cumplir 27 años de cárcel, como lo plantea el Gobierno o 10 años, como lo indica la familia del ex guerrillero.

Ese fue uno de los temas que se tocó en el interrogatorio. Según le habría dicho el ex «comandante» al Magistrado,  “en Brasil me encontraba en régimen cerrado y tengo entendido, por lo que se me informó siempre, que estaba cumpliendo la preventiva y ese tiempo se iba a abonar mientras se resolvía mi extradición; y mi apoderado señor Espinoza, va a solicitar a la abogada de Brasil los documentos fundantes de la ‘preventiva’ y lo que ello conlleva, para presentarlos en este proceso, en razón de abonar ese tiempo de Brasil a la pena impuesta acá. El pedido de extradición se realizó en el año 2003 y aceptado en el año 2006 y en esa fecha se me otorgó la detención provisoria por el proceso de extradición y desde ahí se comienza a contar el tiempo. Eso es lo que tengo entendido”, indicó ante el ministro en visita MarioCarroza.

Hernández Norambuena agregó que “a raíz de que yo tenía más de la mitad de la pena cumplida en Brasil, por los hechos de Brasil, al salir extraditado mi pena se dio por cumplida, y por lo mismo estoy seguro de que yo estaba privado de libertad con detención preventiva. Es más, eso está escrito y es el documento que enviará la abogada de Brasil, y ese tiempo se puede abonar a las penas por los procesos por los cuales he sido extraditado”.

Al finalizar, indicó que “quisiera indicar que como yo ya estaba preso cuando llegó la extradición y se accedió a ella, se escrituró la detención preventiva por ese hecho”.

El ex futbolista Comandante Ramiro

Mauricio Hernández Norambuena, nacido en Valparaíso en 1958, condenado a doble cadena perpetua por el crimen del senador Jaime Guzmán ( 1 de abril de 1991 frente a la Universidad Católica de la Reina en Santiago) y el secuestro de Cristián Edwards, regresó a Chile esta semana, tras ser extraditado desde Brasil.

Hernández Norambuena fue el capitán del equipo de Valparaíso en el XIII Campeonato Nacional Juvenil, jugado en la oficina salitrera de Pedro de Valdivia en enero de 1977. En ese plantel compartió, entre otros, con el goleador Juan Carlos Letelier, seleccionado nacional y mundialista en España 1982; el arquero Jaime Zapata, de recordadas campañas en Wanderers y Everton; y Juan Verdejo, que luego jugaría en Ovalle y Quintero Unido.

El ‘Comandante Ramiro’ era un rústico y rudo defensa central, que formaba dupla con Nelson Orellana. En cancha de tierra, el equipo de Valparaíso terminó en el sexto lugar entre ocho equipos, por diferencia de goles. Hernández Norambuena fue titular en todos los partidos, donde el elenco porteño enfrentó a Santa Cruz (1-3), Temuco (2-1), Pedro de Valdivia (0-5), Cadetes (0-5), San Fernando (2-0), Castro (1-0) y Arica (0-2), agrega el «as».

La historia futbolística del ex frentista nació en el club Orompello, que protagonizó una campaña histórica en 1976, donde ganó el torneo de la Asociación Valparaíso. Mauricio, junto a su hermano Iván y el arquero Fernando Larenas Seguel, fueron figuras claves en el equipo. Larenas, apodado ‘Loco’, fue compañero de armas del ‘Comandante Ramiro’ en el FPMR, donde fue jefe operativo.

En 1979, el Orompello logró la mayor gesta de su historia, al ganar el Campeonato Regional, tras vencer a Quintero Unido en Villa Alemana. En ese equipo, Iván era el defensa central y Mauricio jugó como lateral derecho. En el arco, el ‘Loco’ Larenas lo atajó todo. El ‘Comandante Ramiro’ mostró su ímpetu habitual y fue expulsado, pero eso no fue problema para el equipo del puerto, que levantó la copa con un gol agónico. La historia dice que ese trofeo desapareció para siempre. Un misterio más, como casi todo lo del ex frentista.

¿Pudo cambiar la vida de Hernández Norambuena con el fútbol? Probablemente sí. Tras su éxito en el Regional, Mauricio y Fernando Larenas se fueron a probar a Audax Italiano en Santiago y pasaron la prueba futbolística. Sin embargo, el sueldo era escaso, insuficiente para vivir en la capital, y la decisión implicaba dejar de lado los estudios en la Universidad de Playa Ancha. Ambos rechazaron ser futbolistas profesionales y la historia que siguió ya todos la conocen.