El presidente estadounidense Donald Trump está furioso tras ser informado que un demócrata ganó un cupo vacante en el Senado en Alabama, donde el partido opositor no triunfaba desde 1992. En la era del «trumpismo», Doug Jones, de 63 años (izquierda), hizo historia. Arrebató el curul casi perpetuo en la bancada conservadora al derrotar al juez Roy Moore, acusado por varias mujeres de acoso, lo que no fue inconveniente alguno para recibir el apoyo incondicional y fervoroso del presidente. Moore es acusado de depredador sexual, sin embargo aparece como un estrecho aliado de Trump.
Sin embargo, la guerra de Alabama no está cerrada. En el recuento oficial, Jones aventajó a Moore (derecha) en unos 21.000 votos. Hubo una cantidad algo similar, unos 22.000, que eran papeletas escritas con otro candidato. Esa es la vía que ofrecieron los republicanos para no votar por Moore tras las acusaciones de abusos. Trump felicitó a Jones “por esta victoria tan peleada”, si bien matizó que esos votos escritos habían sido decisivos. Pero añadió: “Una victoria es una victoria”. Moore, entretanto, no reconoce la derrota y pide un recuento de verificación.