La periodista Efigenia Vásquez Astudillo fue asesinada el 8 de octubre de 2017 cuando cubría una intervención de la policía contra un movimiento social indígena.La entidad Reporteros Sin Fronteras (RSF)  pide a las autoridades colombianas que identifiquen y juzguen a los autores de los disparos que acabaron con la vida de la reportera. Igualmente  denuncia el preocupante aumento de los actos de violencia policiaca contra el gremio periodístico.

Efigenia Vásquez Astudillo, periodista de la radio Renacer Kokonuko, murió la noche del 8 de octubre de 2017 en el hospital San José de Popayán, en el sudoeste de Colombia, tras sufrir heridas de bala. La reportera de 31 años de edad fue víctima de varios disparos con arma de fuego cuando cubría una intervención del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), de la Policía Nacional colombiana, contra un movimiento social de comunidades indígenas, en el departamento del Cauca. Dos manifestantes también resultaron heridos durante los enfrentamientos.

RSF declaró que “la cobertura periodística de los conflictos sociales que sacuden el país es cada vez más peligrosa y con frecuencia las fuerzas del orden son las responsables de las agresiones y otros actos de violencia contra los periodistas. Los representantes del Estado colombiano deben respetar el trabajo de los periodistas y protegerlos mejor en todo el territorio, como se había comprometido el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en la entrevista que sostuvo con RSF en agosto pasado”, añadió.

Ese mismo día, el domingo 8 de octubre, también fue atacada por la Policía Antinarcóticos una comisión humanitaria integrada por periodistas, delegados de la ONU, de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de organizaciones defensoras de los derechos humanos, que clarificaba la ‘masacre de Tumaco’ (municipio ubicado en departamento de Nariño, sudoeste del país, donde el jueves 5 de octubre al menos seis campesinos perdieron la vida en un enfrentamiento con la policía colombiana

El 31 de agosto de 2017 representantes de RSF se reunieron con el presidente de Colombia en Bogotá. En la entrevista, Juan Manuel Santos se comprometió firmemente a mejorar la situación de la libertad de prensa en Colombia y a reforzar la protección que se ofrece a los periodistas.

Efigenia Vásquez Astudillo es la primera periodista asesinada en el país en 2017. Colombia se encuentra en el lugar 129, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Expresión y Prensa de RSF publicada en 2017.

Balance de asesinatos en 2017

Dieciseis periodistas han sido asesinados en cinco países de América Latina en lo que va del año 2017: Siete asesinatos ocurrieron en México, dos en Perú, dos en República Dominicana, uno en Guatemala, uno en Honduras, uno en El Salvador, uno en  Venezuela y ahora uno en Colombia.

La muerte a manos de sicarios pagados con dinero de la corrupción política y su principal aliado que hoy sería el narcotráfico, sin perjuicio de otros poderosos sectores económicos, elimina sistemáticamente periodistas libres de compromisos anti-éticos ante la complicidad de sistemas políticos corruptos, permeados hasta los tuétanos por el envilecimiento generado por la corrupción generalizada. Todo esto ocurre en una región del mundo donde no hay ninguna guerra y, teóricamente, debería reinar la paz social en los presuntos “países democráticos” más pregonados de esta parte del mundo.

Bajo el denominador común de la impunidad absoluta en países con cierta anomalia social, la muerte es el atentado definitivo contra un periodista decente, pero no es la única agresión que constantemente sufren reporteros y reporteras de medios pequeños y medianos, y corresponsales de diarios nacionales, principalmente en las provincias y estados.