Foto portada: Kim Jong-Un – Jefe Supremo de la República Popular de Corea Democrática, le pide a los países latinoamericanos que no acaten el pedido del presidente de EE UU, Donald Trump.
Corea del Norte, país parcialmente aislado y desconectado con varias naciones del mundo, tiene sin embargo vínculos estables con cinco países de América Latina donde Pyongyang intercambia embajadas, siendo México, Venezuela y Cuba los más importantes, el primero por el nivel de comercio y los otros por la importancia ideológica que mantienen.
Esta situación choca con el pedido realizado en agosto pasado por el vicepresidente de EE UU, Mike Pence, durante su gira por Latinoamérica, de romper relaciones con Corea del Norte en protesta por las amenazas atómicas de este país asiático que representan “un peligro para la humanidad, al considerarse como “agresivos” sus ensayos nucleares.
En su paso por Santiago de Chile, que incluyó la gira, el segundo hombre de la Casa Blanca recibió dos negativas en su conversación con la Presidenta Michelle Bachelet: 1.- Chile rechazó la solicitud de EE UU de romper sus lazos políticos y económicos con Corea del Norte (no existen embajadas), como medida de represalia por el avance del programa nuclear en esa nación asiática; y 2.- Rechazo a cualquier tipo de apoyo a EE UU para una intervención militar o golpe de Estado en Venezuela oen cualquiera otra nación del mundo como lo había planteado el Presidente estadounidense, Donald. J. Trump, una semana antes de la visita de Pence a Santiago de Chile.
Pence le pidó también en esa ocasión a Chile la recalificación del vino chileno como un ítem de lujo, “para evitar que Corea del Norte pueda sacar beneficios económicos de su comercialización”, lo que también pasó por alto. Lo mismo hizo en Colombia, Argentina y México.
En esa oportunidad el ministro chileno de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, explicó que las relaciones con Corea del Norte “son distantes, porque nosotros hemos aplicado estrictamente todas las sanciones en contra de ese país asiático aprobadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. No hay embajador nuestro en Pyongyang, no hay embajador de Corea del Norte en Chile. De modo que es una relación, yo diría, de muy bajo nivel, pero no tenemos contemplado el cortar relaciones diplomáticas con Corea del Norte”, reiteró.
Kim Jong-Un pidió a los países de América latina que rechacen el pedido que hizo Estados Unidos para que rompan lazos diplomáticos y comerciales con el país comunista. De acuerdo a información de la agencia noticiosa norcoreana Yonhap, un portavoz del Gobierno instó a los países latinoamericanos a no seguir las sanciones de Estados Unidos o la ONU contra Corea del Norte. Además afirmó que Pyongyang continuará con las relaciones amistosas con varios países del mundo que sigan su ideología de autoconfianza y paz.
Corea del Norte comentó que este pedido de Estados Unidos, representa un comportamiento coercitivo que representa una ruptura de las leyes internacionales. “Este comportamiento solo exhibe el extremo egoísmo de Estados Unidos que solo busca beneficios sin importarle sacrificar a todo el mundo”.
Por otra parte, los paquetes de sanciones por la violación del Tratado Nuclear establecidas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en contra de Corea del Norte no afectan a todo el comercio con Pyongyang, por lo que muchos Estados aún mantienen vínculos.
Hay 5 países latinoamericanos que cobijan embajadas norcoreanas: Brasil, Cuba, México, Perú y Venezuela.
Brasil
La relación entre Brasil y Corea del Norte comenzó en 2001, durante el gobierno del ex presidente Fernando Henrique Cardoso. Y en 2005, Corea del Norte abrió su embajada en Brasilia. Cuatro años más tarde, Brasil abrió su dependencia diplomática en Pyongyang. El nivel más alto de comercio bilateral se registró en 2008. En 2016, el volumen fue de 10,75 millones de dólares. La BBC Mundo publicó un informe detallado en el que se da cuenta de la sociedad Brasil-Corea del Norte en los últimos años, aun cuando las sanciones por las pruebas nucleares de la dictadura norcoreana dificultan los intercambios.
Según el Ministerio brasileño de Industria, Comercio Exterior y Servicios local, el año pasado, Brasil exportó a Corea del Norte productos por 2 millones de dólares. El café fue lo más vendido (un 47% del total), pero también vendió tabaco, cueros y pieles y carne vacuna congelada. En cuanto a las importaciones, el gigante sudamericano compró productos por 8,7 millones de dólares. En su mayoría, se importaron piezas de computadora, como tarjetas de memoria digitales (41% del total)
Perú
En agosto de 1975, durante el gobierno militar de Juan Velasco Alvarado, Lima fue sede de la V Conferencia de Ministros de los Países No Alineados. En la cumbre, las dos Coreas solicitaron su ingreso al grupo, pero solo se admitió a Corea del Norte. Tras la decisión, el dictador Kim Il-sung entabló vínculos con Perú. En ese momento, instaló una oficina comercial y recién el 15 de diciembre de 1988, durante el gobierno de Alan García, se abrió la embajada en Lima. Mario Vargas Llosa, en su libro de memorias «El pez en el agua», asegura que «el gobierno de Kim Il-sung había dado ayuda financiera a la campaña de García.»
En 2013, el ex presidente Ollanta Humala recibió las credenciales de Kim Hak Chol como embajador, quien lo invitó a visitar su país aunque ese viaje nunca se concretó. El actual mandatario, Pedro Pablo Kuczynski, también recibió el ofrecimiento pero, por ahora, tampoco ha viajado.
Perú le vende a Corea del Norte cerca de 22 millones de dólares anuales en cobre.
México
México tiene una tradición antinuclear y ha sido líder en el movimiento de desarme con la firma el 14 de febrero de 1967 del Tratado de Tlatelolco, cuyo objetivo es asegurar la ausencia de armas nucleares en América Latina y el Caribe. Sin embargo, esta posición no le ha impedido un fructífero intercambio comercial con un país que se publicita sus test misilísticos.
Ambos países establecieron relaciones diplomáticas el 4 de septiembre de 1980 pero recién en 1993, Pyongyang abrió su embajada en suelo mexicano.
Según el mismo informe del OEC Observatorio de la Complejidad Económica (OCE), México aparece como el socio comercial más importante de Corea del Norte en la región ya que es la fuente de más de 1% de las importaciones totales del régimen: Pyongyang compró en 2015 cerca de US$45 millones en petróleo mexicano y le vendió US$13,8 millones en productos, principalmente piezas de computadora.
Venezuela
Pyongyang abrió su embajada en Caracas tras la muerte de Hugo Chávez. De hecho, con motivo de los funerales del mandatario venezolano se acentuaron los acercamientos y en octubre de 2013, el embajador norcoreano en Cuba, Jon Yong Jin, viajó a Venezuela para estrechar lazos.
En diálogo con Infobae, el vocero occidental de Corea del Norte, Alejandro Cao de Benós explicó que «hace tiempo»que buscaban desarrollar el vínculo con el chavismo. «No sólo por la ideología propia del socialismo, porque los sistemas venezolanos y coreanos son muy diferentes, no tienen nada que ver, sino porque nos interesa que Venezuela siga siendo una nación soberana, independiente de los grandes poderes», asegura Cao de Benós. Y agrega que Corea del Norte en ese terreno tiene mucho para aportar: «Por ejemplo, tenemos mucha experiencia en bloqueos, hemos conseguido desarrollar el sector industrial y ahí podemos ayudar».
Cuba
Si hay norcoreanos que hablan español es precisamente por esta relación. Ambos países mantienen intercambios de delegaciones desde el inicio de sus relaciones bilaterales, con la Revolución Cubana. Ernesto «Che» Guevara visitó Pyongyang en 1960 y Fidel Castro hizo lo mismo en 1986. Cuando el cubano murió, en 2016, el régimen norcoreano declaró tres días de duelo e, incluso, envió una delegación a los funerales.
«Las relaciones con Cuba sí son muy buenas y ahí sí que hay un vínculo ideológico más estrecho y mucha ayuda muta», asegura Cao de Benós. «Siempre nos han ayudado en la parte agrícola ganadera, porque ellos están más desarrollados. A Corea le cuesta conseguir grano y crear alimentos porque la tierra no es fértil y el clima no ayuda. Y nosotros hemos ayudado en la formación militar y también en el tema industrial, desde la ingeniería para la producción de energía eléctrica, hasta la construcción», detalló.
El año pasado, Raúl Castro aprobó un Sistema de Intercambio Comercial que aún no tuvo mucha actividad pero sí es oficial.
Un resonante -y polémico- episodio evidencia hasta qué punto son aliados estos dos regímenes: en 2013, el buque norcoreano, el Chon Chon Gang, fue interceptado en Panamá, llevaba armas escondidas en un cargamento de azúcar cubano. El material encontrado violaba el embargo establecido por la ONU por el plan nuclear norcoreano.
Además de las embajadas ya establecidas, Corea del Norte mantiene relaciones no oficiales, y también comerciales, con otros países de la región. Por ejemplo, tiene oficinas no oficiales en Quito y Guayaquil, un fructífero comercio bilateral con Chile (que le vende cobre, fruta e, incluso, vinos), con Paraguay y Colombia. Según la OEC, en 2015, desde Asunción se compraron 16 millones de dólares en productos norcoreanos.