Charlottesville, en el Estado de Virginia, es una linda ciudad, sede principal de la Universidad del Estado de Virginia, su arquitectura con numerosos edificios de tiempos coloniales, el trazado urbano cuidadoso del legado histórico, le dan singular atractivo, haciéndola destino de turistas americanos y foráneos buscando disfrutar de sus encantos incluyendo la gastronomía sureña;  la biblioteca de la universidad  tiene importantes colecciones de historia y literatura latinoamericanas.   No parecía el lugar imaginable dónde pudieran ocurrir los graves incidentes de violencia político-social con tintes raciales, en la semana recién pasada. ¿Como se pudo llegar a confrontaciones resultantes en muertos y numerosos heridos?

En curiosa combinación de ignorancia y falta de criterio, el Alcalde y Concejales de Charlottesville decidieron  retirar de uno de los parques de la ciudad la estatua del General Robert E. Lee, Comandante en Jefe del Ejército de la Confederación en la Guerra Civil de 1861-65,  todavía figura simbólica de las mejores virtudes de la sociedad sureña 152 años después de la rendición no muy lejos de Charlottesville, en Appomatox, acontecimiento protagonizado por los Generales  Ulisses B. Grant y Robert E. Lee.

La persona del General Lee trasciende su condición militar; estratega,  gran comandante de campo,  ha sido recogida por dramaturgos, novelistas, hay una excelente película filmada para televisión: Gettysburg con su rol protagónico interpretado por Martin Sheen,  una popular serie de televisión de los 1970 en la cual un Dodge dos puertas en rojo brillante llevaba el apodo de «General Lee», y numerosas citas en el folclore destacando uno de los éxitos de Linda Ronstadt: Blue Bayou.   Era previsible la reacción adversa a la decisión de las autoridades edilicias;  para ser justos con alcalde y concejales, no podían preveer la dimensión de los incidentes acaecidos.

El Ku Klux Klan es  una organización estrictamente marginal en Virginia, caracterizada por su extremismo racial con ocasionales arranques de cretinismo, cuando sus integrantes piden hacer uso de su derecho a manifestarse  suelen haber mas policías resguardando el orden que manifestantes en la calle.

Apenas conocida la orden de remover la estatua del General Lee, el KKK convocó a una manifestación sin autorización de autoridades pertinentes; para sorpresa de convocantes y autoridades,  a residentes de Charlottesville se unieron  numerosos individuos provenientes de  ciudades cercanas así como de otros Estados, con vistosos estandartes anunciando su afiliación con un movimiento de alcance nacional  relativamente nuevo, Alt-Right, abreviatura de Alternative Right/Derecha Alternativa, cerrando la manifestación la notoria presencia de grupos explícitamente nazis.    A este cóctel social de por sí explosivo, se agregó la llegada de manifestantes igualmente extremos en su violencia, militantes de una organización de alcance nacional de formación reciente, ANTIFA, por Anti Facistas.  Los resultados son conocidos, ampliamente reporteados en los medios electrónicos y escritos.

Alt-Right es distinto del Tea Party Movement, este último surgido de las bases mas conservadoras del Partido Republicano, dispuesto a respetar las reglas del juego democrático; por su parte, Derecha Alternativa se presenta como un movimiento de rechazo a la democracia representativa y al presidencialismo americano en su forma histórica.   Sin complejos a la hora de colocar algunos de sus militantes armados, por ahora con elementos contundentes, en calles, plazas, campus universitarios, comienza a mostrar rasgos asociados con el comienzo del fascismo mussoliniano.  El surgimiento desde la trinchera del frente de otro grupo violentista, ANTIFA, no es buen augurio  para la política y expresión de fuerzas sociales en los Estados Unidos.

Parece haber rechazo transversal a la declaración genérica del Presidente Trump, denunciando la violencia y llamando a todas las partes a manifestarse pacíficamente con respeto a la ley; destacan las declaraciones de dos políticos del Partido Republicano, quienes se alzan como probables contendores por la presidencia en cuatro años mas, los Senadores  Ted Cruz (Texas) y Marco Rubio (Florida).   Este carro tiene ruedas, habrá novedades, precisamente cuando el Vice Presidente Mike Pence inicia una gira por Sudamérica incluyendo escala en Chile.