El OS-7 de Carabineros desbarató un laboratorio para la fabricación de la droga conocida como “Calvin Klein” (mezcla de cocaína con ketamina), el primero de estas características en el país, en un domicilio de la comuna de Las Condes.

En el procedimiento fue detenida una mujer de nacionalidad colombiana, quien mantenía en uno de los dormitorios 2 kilos 562 gramos de cocaína de alta pureza, además de 663 gramos de marihuana del tipo Cripy y 170 gramos de Ketamina en polvo. También fueron incautados acetona, cafeína y acetato, todos precursores químicos y sustancias utilizadas para elaborar la peligrosa Calvin Klein.

La ketamina (clorhidrato de ketamina) es un agente anestésico usado en animales, no volatil, no barbitúrico y no narcótico, que se sintetizó en 1962.

Este químico puede presentarse de manera líquida e incolora, en polvo blanco (cristales blancos), comprimidos o cápsulas, por lo que es posible utilizarla por distintas vías de administración: intravenosa, intramuscular (líquido), rectal (líquido), nasal (polvo), pulmonar «fumada» (polvo) y oral (líquido, comprimido, cápsulas).

Los consumidores de ketamina experimentan un estado disociativo como si estuviesen «fuera del cuerpo», con sensación de estar flotando. Dicho estado puede ser profundo, generando experiencias alucinatorias y dificultad para moverse, así como alteraciones de la percepción y aparición de flashbacks incluso meses después del consumo, informó Radio ADN.

 Puede provocar depresión respiratoria, paro cardíaco, trastornos de ansiedad, paranoias y su consumo de forma continuada, problemas de memoria, concentración y deterioro de otras habilidades.