“No se va a hacer nunca jamás” habría dicho el alcalde de Vitacura, Raúl Torrealba, frente a un gigantesco proyecto habitacional y comercial que el dueño del Costanera Center, Horst Paulmann, tiene pensado realizar en dicha comuna santiaguina.
El “no se va a hacer nunca jamás” sería la expresión usada por el edil en una sesión del Consejo Comunal realizada el 3 de mayo pasado. Y así le había dicho al mismo Paulmann cuando éste “me pidió una reunión por la Ley del Lobby”.
Cinco días antes del Consejo municipal el empresario chileno-alemán había asegurado por su parte, cuando se le preguntó por el plan que tenía en Vitacura que “esto va bastante bien encaminado”, destacando a su vez la buena voluntad que ha tenido la Municipalidad de Vitacura, según el Diario Financiero.
¿Cuál es el problema con la construcción del centro comercial?
E proyecto de Horst Paulmann -que incluiría un mall, torres de oficinas, departamentos, un hotel y una rascacielo de 55 pisos- cuenta con una autorización extendida en el año 2000 donde las normas urbanísticas eran las del Plan Regulador de Las Condes (que permitía construcciones de gran altura)
Sin embargo las cosas han cambiado en los últimos 17 años, lo que Paulmann no quiere comprender que hoy esa mega construcción no se puede hacer en la esquina de Kennedy con Padre Hurtado y justo frente al Alto Las Condes, donde hoy sólo se puede construir una edificación de no más de siete pisos.
A su vez, la Dirección de Obras Municipales de la Municipalidad caducó el permiso de la obra al vencerse los plazos de construcción, lo que fue ratificado por la Contraloría General de la República.
Sin embargo, Paulmann no quedó ni conforme ni tranquilo, encomendando al Departamento Jurídico de Cencosud que presentara un recurso de reposición ante el Seremi Metropolitano del Ministerio de la Vivienda.
El 13 de noviembre de 2015 cuando la entidad gubernamental-estatal acogió el recurso del empresario con el argumento de que «las solicitudes de aprobación o permisos presentados ante las Direcciones de Obras Municipales debían ser evaluados y resueltos conforme a las normas vigentes en la fecha de su ingreso», es decir en el año 2.000.
Según emol.com tras esa resolución y menos de dos semanas después, la Seremi dio vuelta atrás a su propia decisión emitiendo un dictamen el 25 de noviembre en la que ratificó que lo dicho por la Contraloría era obligatorio y que la caducidad del permiso estaba bien extendido por la Dirección de Obras de la Municipalidad. Luego del revés, la firma del centro comercial presentó un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones contra la Seremi. El tribunal de alzada falló a favor de Paulmann y dejó sin efecto la resolución de la Secretaría que invalidaba la construcción del proyecto. Emol.com agrega que «Después vino otro golpe a favor del Alto Las Condes II, y es que a mediados de 2016 la Tercera Sala de Corte Suprema también acogió el recurso de protección, lo cual hizo recuperar a la empresa su facultad para edificar el centro comercial».
La última reacción de la Municipalidad, a pesar de las resoluciones judiciales, la entregó el alcalde Torrealba: «El proyecto que existía en Padre Hurtado con Kennedy, para esta municipalidad se cayó, no existe (…) la iniciativa fue derogada». Frente a esto Paulmann acotó: «En Cencosud esperan iniciar con la construcción -que alcanzaría una inversión de US$500 millones- este año y que son los temas judiciales los que han mantenido frenado el proyecto».
Problemas con los mega proyectos de P
aulmann
El empresario es propietario también del Costanera Centro, ubicado en la comuna santiaguina de Providencia, que tiene cuatro torres, tuvo igualmente numerosos problemas con el desarrolllo del proyecto, cuya torre principal -la Gran Torre Santiago – tiene 300 metros de altura. Su mirador fue inaugurado el 11 de agosto de 2015.
La construcción de este mega centro comercial y de oficinas se inició el 3 de marzo de 2006. El proyecto tenía un costo estimado de $600 millones de dólares, pero debido a improvistos, superó los US$1.000 millones.
Este centro tiene 710 000 metros cuadrados construidos. El diseño de la Gran Torre Santiago fue realizado por la oficina [argentino estudounidense] Pelli Clarke Pelli. El diseño del centro comercial y de las tres torres restantes, estuvo a cargo de la oficina de arquitectos chilena Alemparte Barreda y Asociados, mientras que el cálculo estructural fue desarrollado por la empresa chilena René Lagos y Asociados.
Los problemas se mantuvieron durante toda la obra. En octubre de 2008, se dio a conocer la paralización de la construcción de las torres 1 y 3 del proyecto, ambas de 165 metros de altura, por motivos económicos originados por la crisis económica mundial de ese año. Sin embargo, la Gran Torre Santiago y la torre 4, de 109 metros, siguieron con su edificación. Esto hasta que el 28 de enero de 2009, por medio de un comunicado de prensa, el grupo Cencosud comunicó la paralización total e indefinida de la construcción del proyecto argumentando que el entonces escenario económico «no justificaba continuar al ritmo actual con la construcción».
Durante el periodo de paralización, se analizó el plan de mitigación vial en el entorno de Costanera Center para evitar grandes congestiones vehiculares una vez inaugurado este proyecto. En todos estos problemas tuvo que intervenir la Dirección de Obras POúblicas del ministerio respectivo como también la Municipalidad de Providencia.
¿Irá a tener Vitacura los mismos problemas que Paulmann origino en Providencia?
o mejor preguntar ¿Quién ganará esta partida: La idea de un alcalde ejemplar o los millones de Paulmann?