Bajas en las expectativas económicas estadounidenses y dificultades para lograr un consenso frente a la reforma sanitaria son los dos más serios problemas que está enfrentando esta semana el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó desde 2,3% a 2,1% las expectativas de expansión de la economía estadounidense para este año, debido a las dificultades que enfrentan las políticas de la Casa Blanca en el Congreso, donde ayer se volvió a postergar la votación de la ley de salud.

La administración de Donald Trump, esperanzada en el impulso económico de sus políticas, proyecta un crecimiento de 3% a partir de 2020, pero el FMI dejó en claro sus dudas al respecto. No sólo calificó de “improbable” esa estimación, sino que además decidió rebajar sus perspectivas para este y los próximos años ante el lento progreso de las agenda legislativa de la administración de Donald Trump en el Capitolio.

De hecho, en la misma jornada la postergación de la votación de la ley que deroga el Obamacare respaldó la tesis planteada por el FMI, donde destacaron lo difusas que aún resultan las propuestas de la Casa Blanca.

“El presupuesto de la administración propone reducir el déficit fiscal y la deuda, repriorizar el gasto público y renovar el sistema tributario. Sin embargo, durante la consulta se hizo evidente que muchos detalles acerca de estos planes todavía están indecisos”, indica la publicación del organismo multilateral.

En ese marco de dudas, para el nuevo pronóstico decidieron utilizar una hipótesis de base de políticas sin cambios, es decir, “no incorpora el efecto de la reforma tributaria ni las reducciones de gastos propuestas en el presupuesto”.

Para los años que vienen, lejos de avanzarse en la ruta de expansión de 3% anhelada por Trump, la economía se desaceleraría, según la organización dirigida por Christine Lagarde. Para 2018 ahora pronostican que se repita el incremento de 2,1% de este año, mientras que antes esperaba un crecimiento de 2,5%, y para 2019 y 2020 apunta a un alza del PIB de 1,8% y 1,9%, respectivamente, cifras que de acuerdo al Fondo están en línea con el “crecimiento potencial subyacente” de la primera potencia mundial.

Estas nuevas estimaciones se acercan bastante a las que había presentado el mismo organismo en octubre del año pasado, cuando Trump aún no vencía a Hillary Clinton en las elecciones presidenciales de noviembre de 2016. Ahí el FMI apostaba por una expansión de 2,2% para el presente ejercicio y de 1,7% para el año 2020.

Reforma sanitaria

Las modificaciones esenciales al Obamacare de su predecesor serán votadas después del receso del 4 de julio, Día de la Independencia,  lo que puede variar si la mayoría republicana sigue sin ponerse de acuerdo con respecto al polémico proyecto que dejaría a 22 millones de estadounidenses sin cobertura médica.

La decisión es un revés para el presidente Donald Trump y el Partido Republicano, que evidencia divisiones internas. Sus senadores pospusieron el martes el voto sobre el proyecto de reforma del sistema sanitario propuesto por el presidente Trump, en medio de una fuerte resistencia dentro del mismo partido que se suma al rechazo de los demócratas.

La decisión es un serio revés para la administración Trump, que hizo de la reforma sanitaria una de sus banderas, y el partido republicano, que desde hace años se propone derogar el Obamacare pero que se muestra dividido puertas adentro con respecto a una alternativa para reemplazarlo.