El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso reducir en 20 puntos el impuesto a las ganancias de las empresas, pasando del 35% al 15%.
Los ajustes, que favorecen incluso a los pequeños negocios, beneficiarán además al tramo superior de los ingresos personales, de 39,6% a 35%.
Según informó el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, «se trata de uno de los mayores recortes de la historia».
La reducción tributaria se contempla en un agresivo plan fiscal de Trump, que fue adelantado esta mañana por la Casa Blanca y beneficiaría a las empresas, la clase media y a ciertos contribuyentes de altos ingresos. El plan fue presentado esta tarde por el principal asesor económico del Presidente Donald Trump, Gary Cohn y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
También impone un impuesto de una sola vez de ganancias sobre los US$2,6 billones que las empresas estadounidenses que están en el extranjero. Entre las reformas que beneficiaría directamente a las personas, propone la condensación de los siete tipos de impuesto sobre la renta existentes a sólo tres, cortando la tasa máxima individual desde 39,6% a a 35%. «En 2017, todavía estamos atascados con un impuesto de sociedades 1988», y es una de las razones de por qué «somos uno de los países menos desarrollados en lo que respecta al impuesto sobre sociedades», dijo Cohn.
Por su parte, Mnuchin afirmó que este recorte estimularía el crecimiento económico de tal manera que cubrirá el costo de bajar los impuestos. «Este va a ser el mayor recorte de impuestos y la reforma fiscal más grande en la historia de nuestro país», dijo Mnuchin en un evento en Washington.
